El café es un producto muy versátil. Por ello, es posible utilizarlo en distintas preparaciones, además de la clásica taza de café americano. A continuación, te damos algunas sugerencias de recetas que seguramente no has imaginado antes.
1) Sácale el jugo al café instantáneo
Hay muchas maneras de preparar el café instantáneo de manera original y deliciosa. Una alternativa es echar en una taza una o dos cucharadas de azúcar más dos cucharadas de café instantáneo. A esta mezcla, se le echa una cucharada de agua y luego se procecede a revolverlos hasta lograr una textura densa, que luego tendrá un aspecto similar al chocolate. Después, echa a la taza agua hervida, hasta cubrirlo.
El resultado es un café cremoso, con espuma en la parte superior. Incluso, se le puede agregar leche caliente y espuma de leche, y se logra un buen capuccino. Para este frío, una buena opción también es agregarle chocolate. Una receta efectiva consiste en agregar 4 tazas de leche a una olla, trozos de tabletas de chocolate, dos cucharadas de café instantáneo y un poco de miel. Esta preparación se calienta y se bate. El resultado alcanza para cerca de cinco tazas. Provecho.
2) Café y licores
Hay muchas recetas que se pueden hacer con alcohol y café y que son sencillas. Una deliciosa y refrescante es el coctel café naranja. Simplemente, hay que mezclar una cucharada de café instantáneo, media copita de cointreau, el zumo de una naranja y dos cucharadas de azúcar. Luego se bate bien y se echa en un vaso.
El amaretto también es un buen complemento. Para hacer un buen café al amaretto, servimos en una taza, 2 cucharadas de este licor, azucar al gusto y una taza de café. Los ingredientes se mezclan hasta que el azúcar se disuelva. También tenemos que mencionar al tradicional Irish Coffee, que se puede preparar, en su versión más clásica -para dos copas- con 40 ml. de whiskey escocés, 2 tazas de café caliente, 4 cucharadas de azúcar y 200 ml de crema de leche.
3) Deliciosas galletas de café
Esta receta es muy simple. Solo se requiere de 160 gramos de mantequilla, 200 gramos de harina, azúcar, sal, bicarbonato de sodio, dos cucharadas de café instantáneo, dos cucharadas de leche y unas gotas de esencia de vainilla. Estos ingredientes se baten hasta formar una pasta, la cual se amasa hasta que tome forma. Luego se forman las galletas, tomando porciones en bolas y luego se las aplasta sobre una bandeja, la cual debe ir a un horno precalentado a 200 grados por 10 minutos.
4) También para postre
La versatilidad del café nos permite crear incluso un dulce flan de café. Primero, se hace el caramelo con 100 gramos de azúcar, fundidos en una sartén a fuego alto. Aparte, en un tazón, se baten 4 huevos con 350 gramos de leche condensada, 10 onzas de leche y dos tazas de café. Luego, se coge un molde, se echa el caramelo y, después, esta se mezcla y se cocina, a baño maría, en un horno precalentado a 170 grados por 40 minutos.
Tras dejar que se enfríe, el flan se voltea y se decora con hojas de menta. Y, aunque es invierno, no está de más un postre helado. En un recipiente, puedes batir 4 yemas de huevo con 220 gramos de azúcar, mientras se vierte un litro de leche y una lata de crema de leche. Esta mezcla se caliente en una olla a fuego lento hasta que espese. Luego, agrega una cucharada de café, dos sobres de gelatina sin sabor disuelta y una cucharadita de vainilla. Tras enfriar la mezcla, la echamos en un molde, que se debe colocar en la congeladora por tres horas.
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