ANKARA, Turquía (AP) — El banco central de Turquía mantuvo el jueves su crucial tasa de intereses sin modificaciones por segundo mes consecutivo, pese a una inflación desorbitada que ha causado que muchas personas en el país batallen para comprar alimentos y productos básicos.
Un comunicado del Comité de Política Monetaria del banco informó que mantendrá su tasa de interés “constante” en 14%. El mes pasado, el banco central suspendió su política monetaria de reducción de tasa de interés después de reducir los costos de préstamo por cinco puntos porcentuales desde septiembre.
La serie de reducciones de tasa detonaron una crisis monetaria y dispararon los precios al consumidor. Por lo general, los bancos centrales aumentan sus tasas de interés para combatir un alza de inflación.
Sin embargo, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, autoproclamado enemigo de tasas de interés altas, ha presionado al banco central para que baje los costos de préstamos en su intento de impulsar el crecimiento. El presidente argumenta que las tasas de interés altas causan inflación, contradiciendo la opinión económica convencional.
La lira turca perdió alrededor de 44% de su valor frente al dólar el año pasado, al tiempo que la inflación se disparó aproximadamente 49% el mes pasado, llegando al nivel más alto en 20 años y afectando seriamente los ahorros y el poder de compra de la población. De acuerdo con los expertos, la tasa real de inflación podría ser mucho más elevada que la cifra oficial.
El gobierno de Erdogan ha presentado medidas poco convencionales para detener la depreciación de la lira turca en vez de aumentar las tasas de interés.