Películas de zombies y de estilo ‘falso documental’ con cámara en mano se habían hecho varias, pero la española REC, allá por el 2007, elevó a ambos géneros a un nuevo nivel.
La trama era simple. La periodista Ángela Vidal, interpretada por Manuela Velasco (39), se adentra en una estación de bomberos esperando ser testigo de una misión importante. Sin embargo, tras una llamada de auxilio, se ve atrapada en un edificio de Cataluña infestado de violentos zombies.
La cinta fue tan exitosa que inclusive tuvo una adaptación en EE.UU. (Cuarentena, 2008) y los ojos del mundo se posaron en esta actriz madrileña que gracias a su magistral actuacióin ganó el Goya 2007 a Mejor Actriz Revelación.
Hoy se estrena a nivel mundial REC 4: Apocalipsis, la última entrega de esta saga de terror con Velasco a la cabeza. Publimetro conversó con la actriz española, quien está gratamente sorprendida con el éxito de la cinta.
¿Cuánto ha impactado en tu vida esta saga? * Realmente ha cambiado mi vida. He tenido la oportunidad de vivir experiencias absolutamente increíbles gracias a la saga. He tenido que meterme en la piel de esta periodista y enfrentarme a criaturas, situaciones y emociones que gracias a Dios en la vida real no tenemos que enfrentar (risas). Gracias a REC mi trabajo se ha visto en todo el mundo. *Mira que nunca imaginé que me entrevistarían desde Perú (risas).
¿Qué hace diferente esta entrega de las demás? Pues que esta película es más de supervivencia, de aventura. Es un thriller más de acción con mucha adrenalina pero con todo el universo de zombies de REC como telón de fondo. Además, abandonamos el edificio de Cataluña y nos vamos a un barco a donde nos trasladan a todos los sobrevivientes del virus. Y no es que estuvimos en un estudio y simulamos un barco, sino que el rodaje se hizo en uno de verdad
*Debe haber sido bastante complicado… * ¡Uf, madre mía! Como ven en el trailer el virus se expande en el barco cuando está en medio del océano. No hay a dónde ir. Las características reales del barco eran muy agobiantes. Los espacios eran muy reducidos. Tanto que al grabar nos golpeábamos y nos cortábamos con las paredes de metal. Había sido un barco real de pesca y olía a grasa y óxido. La atmósfera era irrespirable. Pero todo eso nos ayudó a meternos en personaje. Realmente era una pesadilla porque, al igual que los personajes de la película, todos queríamos salir de ahí e irnos a casa.
*La primera entrega destacó por el magistral uso de la camara en mano, nada parecía actuado… * Es que hubo mucho de improvisación. Todo era en tiempo real y la cámara registraba lo que realmente pasaba. Los directores -Jaume Balagueró y Paco Plaza- incluso nos daban órdenes contradictorias a los actores para que entráramos en conflicto y resolvamos las situaciones en el acto.
*¿Eras fanática de las cintas de terror antes de REC? * Para nada. De hecho de pequeña tuve una mala experiencia cuando vi a escondidas La Noche de los Muertos Vivientes (1968). Pero ahora las disfruto plenamente.
*¿Qué es lo más raro que has hecho hasta ahora? * Tres películas de zombies (risas).