El sistema de grilletes electrónicos que se aplicará este año en el Perú a procesados e internos de los penales ofrece un cien por ciento de garantía de que, quienes lo usen, estarán bien monitoreados y no representarán ningún riesgo para la sociedad.
Así lo afirmó Diego Velasco, gerente general de Global Circuit, empresa que conforma el consorcio Global Seguridad, ganador de la buena pro para la implementación de ese sistema, que será financiado por el propio interno.
Velasco sostuvo que la sociedad puede tener la plena seguridad de que la concesión de este beneficio a internos (con condenas menores de ocho años) no significará ningún peligro. ‘Podemos asegurar que un interno con grilletes estará mejor vigilado que en una cárcel’, dijo.
En diálogo con Andina, subrayó que el sistema electrónico es antisoborno, ya que todos los movimientos de quien los lleva quedan registrados y no hay manera de alterarlos.
Explicó que el juez que otorga el beneficio para que un interno use grilletes en vez de estar en prisión tiene la potestad de autorizar si éste puede salir de su domicilio para estudiar o trabajar. Con esa finalidad, le establece una ruta a seguir y otra alterna y dentro de un horario determinado.
‘Si el interno se sale de esos parámetros, todo quedará registrado en el sistema y esa información no podrá ser modificada de ninguna manera. Si existe entonces una violación a la disposición judicial de todas maneras se sabrá’, detalló al mencionar el éxito y la efectividad que este sistema ha tenido por más de diez años en el mundo.
Agregó que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) tendrá acceso a esos registros a través de claves y podrá chequear en cualquier momento el movimiento de los internos beneficiarios.
En caso se diera una violación de las reglas impuestas por el juez, éste será informado para que tome la decisión correspondiente que puede ser el retorno del interno a un penal.
Velasco indicó que si bien acceder a este sistema le costará al interno unos 18 soles diarios aproximadamente, esa suma es menor a lo que gasta dentro del penal para pagar seguridad y vivir con cierta tranquilidad.
‘Con este sistema ganan todos. Los que van a cumplir prisión domiciliaria porque pueden vivir con sus familias, los que se quedan dentro porque tendrán más espacio, el Estado porque no le costará nada y no tendrá que construir muchas más prisiones y la sociedad porque ya no tendrá que pagar con sus impuestos la manutención de estos internos en una cárcel’, explicó.
Los grilletes
Están hechos de caucho, porque deben ser cómodos para quien los usa y tienen varios sensores que envían información sobre la localización usando una red satelital.
‘El grillete está en capacidad de enviar mensajes a quien lo usa cuando la batería necesita ser recargada o si se le intenta destruir a golpes. En esos casos lanzan alarmas, por lo que inmediatamente y a través del mismo grillete, desde la central de monitoreo se comunicará con el interno para advertirle de la situación’, detalló.
La iniciativa privada para la aplicación de este sistema de vigilancia electrónica personal se presentó a Proinversión hace más de tres años y fue aprobada recientemente. Actualmente se están definiendo los aspectos no esenciales del contrato.
El sistema tendrá dos centrales de monitoreo, una en Lima y otra más pequeña en alguna otra ciudad del país aún no definida, que servirá como un respaldo si la primera resultase dañada por un sismo o un evento similar.
Una central de monitoreo de este tipo será similar a un call center con pantallas en las cuales cada vigilante monitoreará a un máximo de 200 internos, pero esta central no tiene un techo y puede permitir la vigilancia ilimitada de personas.
Se espera que en un cierto plazo se otorgue el beneficio de los grilletes a unos 15,000 o 20,000 beneficiarios, lo que significa la población de varias cárceles.