El candidato que encabeza las preferencias de los republicanos para las elecciones presidenciales de 2016, Donald Trump, llamó este lunes a frenar el ingreso de musulmanes a Estados Unidos.
“Donald Trump llama al cese total y completo del ingreso de musulmanes a Estados Unidos hasta que los legisladores de nuestro país comprendan lo que está sucediendo”, escribió el equipo de campaña del postulante en un comunicado titulado “Comunicado de Donald Trump para impedir la inmigración musulmana”.
La propuesta no precisa si incluye a los musulmanes estadounidenses.
Sin embargo, al evocar un sondeo realizado entre musulmanes que viven en Estados Unidos, Trump afirmó que muchos de ellos sienten “odio” por los estadounidenses.
“De dónde viene este odio y por qué, debemos determinarlo. Hasta que seamos capaces de establecerlo y de comprender este problema y la amenaza que representa, nuestro país no puede ser víctima de ataques hostiles de parte de gente que sólo cree en la yihad y no tiene respeto alguno por la vida humana”, declaró el candidato en el comunicado.
REPUDIO GENERAL Su anuncio motivó un repudio unánime que abarca desde altos funcionarios de la ONU a jefes de Estado extranjeros, pasando por prácticamente todos los sectores de la opinión pública estadounidense. Asimismo, la declaración fue fuertemente condenada por la Casa Blanca, que denunció el comunicado de Trump como “totalmente contrario a los valores” de Estados Unidos.
Para el primer ministro británico, David Cameron, las declaraciones de Trump sobre los musulmanes son “simplemente equivocadas”.
Manuel Valls, el generalmente discreto primer ministro francés, fue todavía más directo y en un mensaje en Twitter afirmó que Trump, “al igual que otros, alimenta el odio y las generalizaciones”.
En Ginebra, la portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), Melissa Fleming, expresó este martes la “preocupación” de ese organismo con las ideas defendidas por el aspirante presidencial del Partido Republicano.
“Estamos preocupados por la retórica utilizada en la campaña electoral que pone en peligro un importante programa de acogida” de refugiados sirios, dijo Fleming.
El director del Centro Islámico de Nueva Jersey, Ahmed Shadeed, advirtió que las ideas de Trump “están (incitando a que) la gente nos haga daño”.
En Estados Unidos, la reacción a las declaraciones de Trump también fueron airadas: y el polémico candidato fue tratado en las redes sociales de “demagogo fascista, y hasta hubo quien propuso que sea colocado en un cohete y enviado al espacio.
El exgobernador de Florida Jeb Bush escribió en Twitter que “Donald Trump está desquiciado”.
En la misma línea se pronunció el senador Lindsey Graham, uno de los pesos pesados del Partido Republicano en cuanto a seguridad nacional. “Todo candidato a la presidencia debe hacer lo correcto y condenar el comunicado de @realDonaldTrump”, tuiteó.
El presidente de la Cámara de Representantes, el conservador Paul Ryan, dijo este martes que las declaraciones de Trump “no es conservadurismo”, y recordó que hay “muchos musulmanes en nuestras Fuerzas Armadas, inclusive muchos musulmanes que trabajan en el Congreso”.
Los demócratas tampoco se quedaron callados. El aspirante Martin O’Malley aseguró que “Donald Trump disipa todas las dudas: hace campaña para la presidencia como un demagogo fascista”.
Por su parte, el multimillonario Jeff Bezos publicó un mensaje donde afirmó que se encargará de “reservar (a Trump) un asiento en el próximo cohete Blue Origin. Mándenlo al espacio”.
Trump justificó su idea de un cierre completo del país a los musulmanes “hasta que los legisladores entiendan qué diablos está pasando”, pero el diputado republicano Mike Turner dijo que esa visión era “deplorable”.