‘Creced y multiplicaos’, ese es el mandato divino que asegura obedecer Mike Holpin. Este sujeto tiene 56 años y es padre de 40 hijos con 20 mujeres diferentes.
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‘Nunca me detengo’, dice Holpin aludiendo a la cita divina que obedece aunque no recuerda a sus hijos y confunda de qué madre provienen. Además, admite que no reconocería a la mitad de ellos si se los cruzara en la calle.
Según Holpin, para guardar registro de todos sus hijos decidió tatuarse el nombre de cada uno en la espalda. Pero, Holpin no es un gran padre. De echo, es alcohólico en recuperación, percibe 40 mil dólares al año para solventar a parte de los hijos, cuyas edades van desde los 3 hasta los 37 años.
En una entrevista al diario inglés DailyMail reconoció: ‘Soy tan fértil como el pecado. No creo en la anticoncepción y amo el sexo’.