FARC anuncia “pausa” en diálogo de paz con el gobierno colombiano

Líderes del grupo guerrillero analizarán propuesta del presidente Juan Manuel Santos de realizar un referéndum en 2014.

(AFP). La guerrilla comunista de las FARC anunció este viernes que hará una “pausa” en las conversaciones de paz con el gobierno colombiano en La Habana, para analizar la propuesta del presidente Juan Manuel Santos de realizar un referéndum en 2014 si se alcanza un acuerdo.

“Ante esta nueva circunstancia (…) la delegación de paz de las FARC ha decidido hacer una pausa en la discusión de la mesa para centrarse exclusivamente en el análisis de los alcances de la propuesta gubernamental”, dijo la guerrilla en un comunicado leído a la prensa por Pablo Catatumbo, miembro de la delegación que negocia la paz con el gobierno de Santos en La Habana desde noviembre de 2012.

“Les pedimos que entiendan que queremos actuar con responsabilidad, con sensatez, con madurez, con ponderación, en el análisis de esta coyuntura que se ha presentado”, declaró Catatumbo, antes de leer ante la prensa la declaración de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Catatumbo, que no precisó cuánto duraría la pausa, recordó que el grupo rebelde había propuesto convocar “una asamblea nacional constituyente para que sea el soberano el que decida sobre los temas cruciales (…) de todos los colombianos”.

La delegación del gobierno colombiano, que preside Humberto de la Calle, que no formuló declaraciones en torno a la pausa este viernes, permanecerá en la isla, lo mismo que la de la guerrilla.

“La delegación del gobierno permanece en Cuba”, dijo a la AFP una fuente de ese equipo gubernamental, indicando que sus miembros aprovecharán “este receso para hacer análisis internos”. Estaba previsto que el presente ciclo de pláticas culminara el próximo jueves.

Santos envió el jueves el Congreso un proyecto para que un eventual acuerdo de paz con las FARC —que ponga fin a un conflicto armado de casi medio siglo— pueda ser refrendado por los colombianos en las elecciones de 2014. El conflicto ha dejado unos 600.000 muertos y más de tres millones de desplazados.

El proyecto de ley estatutaria busca “que los acuerdos finales para poner fin al conflicto se puedan presentar (en referendo) en un día que coincida con las elecciones normales; es decir, en las elecciones de Congreso, que sería lo que estamos buscando, o en las elecciones presidenciales” de 2014, dijo Santos al anunciar la iniciativa.

Menos de una hora después del anuncio de Santos, el presidente del Congreso, Juan Fernando Cristo, introdujo el proyecto de ley al Parlamento, donde la coalición de centro-derecha de Santos tiene mayoría.

La ley vigente sobre mecanismos de participación ciudadana impide que un referéndum se realice el mismo día de elecciones nacionales, aunque la consulta, en caso de que se alcance un acuerdo con las FARC se podría convocar en otra fecha de 2014.

El 11 de junio las FARC, que han exigido reiteradamente una asamblea constituyente, habían propuesto aplazar por un año las elecciones legislativas y presidenciales de 2014 (lo que implicaba extender el mandato de las actuales autoridades), lo que fue rechazado por Santos.

Las FARC también condenaron este viernes en otro comunicado el “tratamiento militarista” que el gobierno de Santos está dando a las protestas campesinas, iniciadas el lunes.

Hasta ahora el gobierno y la guerrilla han debatido dos puntos de una agenda de cinco: el desarrollo rural, ya consensuado, y la participación política de la guerrilla, actualmente en discusión.

Quedan aún por abordar los puntos sobre drogas ilícitas, abandono de las armas y reparación a las víctimas.

El martes las FARC hicieron por primera vez un mea culpa y admitieron tener su cuota de responsabilidad por las víctimas de la violencia en Colombia, casi un mes después de que Santos admitiera por primera vez la responsabilidad del Estado en “graves violaciones” de los derechos humanos en el marco del conflicto.

Las FARC, fundadas en 1964 y con unos 8.000 combatientes en la actualidad, son la guerrilla más antigua de América Latina. Este es su cuarto intento de lograr un acuerdo de paz, luego de tres experiencias fallidas en los años 1980, 1990 y 2000.

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