La cadena de comida rápida Taco Bell señaló que la imagen de un empleado lamiendo una torre de tacos corresponde a una participación malintencionada en una campaña interna para promover un nuevo producto.
Dos miembros del personal están implicados en la instantánea que “claramente violaba las reglas y el espíritu del concurso”, señaló la empresa en un comunicado. “Pero un empleado la publicó en una cuenta personal de redes sociales, violando la política de la franquicia y ésta emergió en medios sociales”.
“Inmediatamente investigamos la situación y nos enteramos de los hechos a través del franquiciado. Continuamos la investigación y nuestra franquicia coopera completamente”, agregó el comunicado.
Taco Bell asegura que los alimentos no llegaron a las manos de los comensales, pues eran parte del entrenamiento previo al lanzamiento del nuevo producto.
El empleado que aparece en la fotografía fue suspendido y “en proceso de terminar contrato”, mientras que el trabajador que publicó la imagen no sigue laborando.