Si bien los perros son las mascotas más populares, los gatos se mantienen en el segundo lugar de preferencia, y la tenencia pasó de ser racional (evitar presencia de roedores) a ser más emocional, como integrantes del hogar considerados el hijo (a) menor de la familia1.
Los gatos son animales de gran agilidad y les gusta estar en movimiento. Si bien su carácter es muy independiente, eso no significa que no requieran de algunos cuidados para mantener su estado de salud. Ricardo Reyes, gerente del negocio de Animal Health de Bayer precisa algunos datos sobre estas mascotas que se deben tener en cuenta en su crianza.
Según explicó, pasados los primeros dos meses de vida, el gato comienza a independizarse. Primero irá dejando la leche y a las ocho semanas comenzará a depender de sí mismo. Por pequeño que sea, el gatito debe ser de inmediato desparasitado. Por esta razón se debe visitar al médico veterinario, conocer su estado de salud y comenzar a familiarizarte con su calendario de vacunación, su futura esterilización y todos los cuidados que requiere antes del año de vida.
Su alimentación también representa un factor importante. El especialista señala que según la raza y la edad del gato, las recomendaciones irán variando. Es importante respetar las cantidades sugeridas y ayudar a que la mascota respete los horarios de comida. Considerar la hidratación cotidiana con agua fresca y el aseo de los recipientes para evitar gérmenes.
Entre las enfermedades más comunes de los gatitos se encuentran las asociadas a los órganos de la piel, como las alergias y dermatitis y a los ojos como la otitis y conjuntivitis.
La piel es uno de los órganos más sensibles del gato y en donde se pueden desarrollar muchas enfermedades. Estas pueden ocurrir por diversos factores como reacción a componentes en alimentos, ácaros o elementos externos en el ambiente y a la aparición de dermatitis alérgica por picadura de pulgas.
De las más de 2.000 especies de pulgas que existen en el mundo la más común es la Ctenocephalides felis o comúnmente conocida como la pulga del gato, que a pesar de su nombre puede alimentarse de una amplia variedad de animales, incluyendo perros, conejos, pequeños roedores, aves e incluso personas.
Es paradójico señalar que en algunos países más del 90% de los perros presenta la pulga del gato, mientras que menos del 10% están infestados por el Ctenocephalides canis (pulga del perro).
Todos los gatos y perros del hogar deben ser tratados con productos repelentes de parásitos externos que sean eficaces frente a las pulgas y también las garrapatas. ‘Debemos hacerlo durante todo el año y durante toda su vida para limitar infestaciones del animal y prevenir que las pulgas se instalen en casa’, señala el especialista.
En el mercado existen diversos productos contra pulgas; sin embargo desde este año se cuenta con Seresto, de Bayer. Seresto es un práctico collar con una nueva tecnología de aplicación que protege a gatos y perros contra pulgas, garrapatas y piojos de manera continua hasta por 8 meses y ayuda a proteger a la mascota de las enfermedades que estos parásitos pueden transmitir.
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