Más de la mitad del cuerpo está compuesto por agua. Esta sustancia es fundamental para la vida. Ayuda a transportar los nutrientes y contribuye con la eliminación de toxinas.
Sus beneficios son de suma importancia para las personas; sin embargo, muy pocos bebemos la cantidad que nuestro cuerpo necesita. Consumir 2 litros diariamente te mantendrá hidratado todo el día. Esta tarea suena fácil, pero cumplir con esta ‘obligación’ cuesta bastante.
En ese sentido, y celebrando el Día Mundial del Agua, Paloma Rodríguez nutricionista del Club Médico Deportivo Bodytech, da las siguientes pautas para que llegues a la meta.
Ten agua siempre cerca
Cuando sientas sed, tendrás cerca el agua y de esta manera la flojera no será la excusa para no beberla.
Usa un vaso pequeño y ancho
Utilizando un vaso de esas características podemos consumir un 76% más de agua en comparación de un vaso alto. De esta manera, engañamos a nuestro cerebro ya que le haremos creer que estamos tomando una cantidad menor.
Haz de las infusiones tus mejores aliadas
Recuerda que están hechas de agua. Si estás acostumbrado a consumir estas bebidas después de almuerzo o a media tarde sin querer podrás haber consumido los dos litros necesarios.
Los refrescos naturales
A muchos no les gusta tomar agua sola, es por eso que otras alternativas como el agua de manzana o piña o limonada o naranjada o chicha morada, pueden ayudarte a consumir agua, igualmente todas estas bebidas deben ser bajas en azúcares.
Aumenta el consumo de frutas y verduras
Las verduras y frutas contienen el 1/5 parte del agua que necesitamos consumir diariamente.
Usa alarmas
La tecnología también puede convertirse en un aliado si de ayudarnos en la tarea de beber agua. Existen aplicaciones que te envían recordatorios para consumir agua, además de ayudarte con el registro de la cantidad que has tomado.
Adicionalmente, nuestro cuerpo también es un buen aliado al momento de ayudarnos a saber cómo va el consumo del agua en nuestro organismo. Una orina al final del día de color amarillo, refleja que la cantidad de agua bebida no ha sido suficiente.
La sed también es un indicativo de la falta del líquido elemento, cuando nos sentimos sedientos es una señal tardía que el cuerpo nos envía para decirnos que estamos deshidratados.
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