Es uno de los casos más violentos y sangrientos del Reino Unido. Una joven de 21 años mató a puñaladas a su madre de 58 años. No fueron una, dos, ni tres heridas punzo penetrantes, fueron 30 puñaladas que acabaron con la vida de la mujer.
No cabe en una mente cabal, lo que puede pasar por la psique de alguien al acabar con la existencia de quien le dio la vida. Esto solo lo podría explicar la agresora en este crimen, quien está detenida por matar a su madre.
Lo más sorprendente del crimen es que la chica admite haber apuñalado a su madre, pero recalca que no fue un asesinato.
El portal británico The Mirror identificó a la joven como Hanna Bennis. Su madre era Aziza Bennis, quienes residían en el oeste de Londres. El hecho fue en agosto del 2022.
Los gritos desesperados de la víctima alertaron a los vecinos, quienes llamaron a la policía.
Los uniformados llegaron a su apartamento en Boddington Gardens, Ealing, pero ya era demasiado tarde. Encontraron a Aziza muerta en el piso en posición fetal. Tenía puñaladas en la cara, en la cabeza, en los brazos y en las piernas.
Detuvieron a su hija, quien a partir del 31 de julio, enfrentará un juicio en Old Bailey de Londres. El proceso durará dos semanas.
“Ella (su hija Hanna) compareció ante el tribunal el lunes y negó el asesinato, pero se declaró culpable de un cargo menor de homicidio involuntario por razón de responsabilidad disminuida”, publicó The Mirror.
Aziza era querida entre sus vecinos
El referido portal británico presentó el testimonio de los vecinos de Aziza, la describieron como una persona amable y querida en la comunidad.
Tenía alrededor de unos 17 años residiendo en el lugar, donde siempre la conocieron como una mujer muy sonriente.
Laboraba en la Escuela Ark Acton Academy, cuyo director mostró su pesar por su fallecimiento.
“Es una noticia devastadora y nuestros pensamientos están con la familia de Aziza en este momento difícil”, dijo el director, según el medio.