BERLÍN (AP) — El jefe de derechos humanos de la ONU denunció el martes las crecientes restricciones a las mujeres en Afganistán, y pidió al Talibán a levantarlas de inmediato.
La reciente prohibición a las ONG de contratar a personal femenino tendrá “consecuencias terribles”, advirtió el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk.
La semana pasada, los talibanes le prohibieron a las mujeres educarse en las universidades, lo que desató condenas internacionales y protestas de mujeres dentro del país. El sábado, la milicia islámica anunció que las ONG no pueden contratar personal femenino, lo que llevó a cuatro agencias internacionales a suspender sus operaciones en Afganistán.
“Ningún país puede desarrollarse —de hecho, ni siquiera podrá sobrevivir— social y económicamente si excluye a la mitad de su población”, indicó Türk en un comunicado emitido en Ginebra.
“Estas restricciones inimaginables sobre las mujeres y niñas no solo aumentarán el sufrimiento de todos los afganos sino que, temo, presentan un riesgo más allá de las fronteras de Afganistán”, agregó.
“Este nuevo decreto de las autoridades de facto tendrá consecuencias terribles para las mujeres y para todo el pueblo afgano”, dijo Türk, añadiendo que prohibirle a las mujeres trabajar para ONGs despojará a ellas y a sus familias de trabajo, de fuentes de ingresos y de la posibilidad de “contribuir positivamente” al desarrollo del país.
“La prohibición entorpecerá significativamente, e incluso podría destruir, la capacidad de esas ONG de prestar servicios esenciales de los que dependen tantos afganos vulnerables”, indicó.
Aunque el Talibán inicialmente prometió un régimen más moderado y el respeto a los derechos de las mujeres cuando se alzó con el poder el año pasado, recientemente ha estado aplicando su interpretación estricta de la ley islámica conocida como Sharia.
La milicia le ha prohibido a las niñas ir a la escuela, la ha prohibido a la mayoría de las mujeres ir a trabajar y ha impuesto la orden de que todas deben cubrirse de la cabeza hasta los pies en público. También se le ha prohibido ir a parques y gimnasios.