TOKIO (AP) — Japón ordenó el martes al cónsul ruso en la norteña ciudad de Sapporo que abandone el país en un plazo de seis días, en represalia por la expulsión por parte de Moscú de un diplomático japonés el mes pasado por supuesto espionaje.
El ministro de Relaciones Exteriores de Japón, Yoshimasa Hayashi, dijo que su ministerio declaró al cónsul persona non grata —persona indeseable— y le ordenó que deje el suelo japonés antes del lunes próximo. La cancillería no dio a conocer el nombre del cónsul, pero dijo que la decisión “se tomó como una medida apropiada en respuesta a las medidas tomadas por Rusia”.
Hayashi dijo que el vicecanciller Takeo Mori convocó al embajador ruso en Japón, Mikhail Galuzin, para informarle sobre la decisión.
El mes pasado, Rusia detuvo al cónsul japonés en Vladivostok bajo acusaciones de espionaje y lo expulsó. El cónsul Tatsunori Motoki regresó a Japón la semana pasada.
Las autoridades japonesas dicen que a Motoki le vendaron los ojos y lo sujetaron físicamente mientras lo interrogaban por presunto espionaje. Se le ordenó abandonar el país en 48 horas. Japón ha negado los señalamientos.
Hayashi ha calificado el trato ruso a Motoki como una clara violación del derecho internacional.
La disputa es el ejemplo más reciente del agravamiento de los lazos bilaterales luego de que Japón le impuso sanciones a Rusia por haber invadido Ucrania. Ambos países han expulsado a varios diplomáticos del otro gobierno, y Moscú suspendió las negociaciones de paz con Tokio, que incluyen conversaciones sobre unas islas tomadas por la entonces Unión Soviética al final de la Segunda Guerra Mundial.
La semana pasada, el primer ministro Fumio Kishida condenó la anexión de regiones ucranianas por parte de Rusia y dijo que Japón planea imponer más sanciones contra Moscú.