MONTEREY, California, EE.UU. (AP) — El equipo Penske llevó a Will Power hasta el límite, pero contuvo la pelea interna con su compañero para cerrar una temporada consistente con su segundo campeonato de la IndyCar.
Power terminó tercero en Laguna Seca Raceway para superar por 16 puntos a su compañero Josef Newgarden en la clasificación final. El australiano conquistó su primer título en la IndyCar en 2014.
“Hombre, es tan surreal”, dijo Power al cruzar la meta detrás del saliente campeón Alex Palau y Newgarden, quien se mantuvo agresivo en todo momento para hacer sudar a Power hasta la bandera a cuadros.
Power sólo necesitaba terminar tercero para consagrarse. Pero el equipo confirmó esta semana que sus autos compiten de forma individual y que lo tres pilotos podrían pelear por el campeonato.
Newgarden estuvo implacable.
“Al final estoy orgulloso del equipo”, dijo un abatido Newgarden. En días recientes habló de su motivación personal para ser perfecto y cómo le afecta emocionalmente.
Luego de ganar cinco fechas esta temporada, su inconsistencia simplemente lo colocó en problemas para superar a un consistente Power.
Power, de 41 años, insistió todo el año que “iba a largo plazo” pensando en su segundo campeonato. El australiano ganó sólo una carrera, pero su promedio fue de sexto lugar y rara vez titubeó. El sábado consiguió su 68va posición de honor y superó al marca histórica de la serie de Mario Andretti.
Ahora, el hombre más veloz de la IndyCar es el más consistente y premio al dueño del equipo Roger Penske con su 17mo campeonato.