Un ataque de proyectiles sufrió el bus que trasladaba al primer equipo del Palmeiras rumbo al estadio Allianz Parque de Sao Paulo donde debía enfrentar al Junior de Colombia por la Copa Libertadores.
Lo curioso es que fueron los propios hinchas del Palmeiras quienes cometieron ese acto vandálico. Aunque una acción así no tiene justificación, esto se debió a los malos resultados que venía obteniendo la escuadra verde que dirige Luiz Felipe Scolari.
El domingo pasado, Palmeiras fue eliminado de la Copa Paulista a manos del Sao Paulo, en tanda de penales, y antes fue derrotado en la Copa Libertadores por el San Lorenzo, en Argentina.
La furia de los hinchas se desbordó y decidieron presionar a los jugadores atacando el bus que los llevaba al estadio para enfrentar a Junior, partido que ganaron por 3-0.
“¿Me ven con la cara de asustado? No tengo miedo de los bandidos, ninguno teme a los bandidos. Nosotros tenemos respeto por nuestro club y nuestros hinchas y nosotros trabajamos para nuestros hinchas. Los jugadores tienen que afrontar esto con naturalidad. No vamos a darle visibilidad a quienes no lo merecen. Por el amor de Dios, ya paren con eso”, expresó Luiz Felipe Scolari sobre el ataque al bus, en conferencia de prensa, tras el triunfo ante Junior.