La demencia y el Alzheimer son trastornos neurológicos progresivos que no tienen cura. La mayoría de las personas las detectan cuando están en una fase avanzada. No todos saben que hay síntomas sutiles que pueden ayudar a diagnosticarlas. Aunque no son curables, sí tienen tratamiento con un diagnóstico temprano, que ayudará a que no avance tan rápido.
Los síntomas se caracterizan por la pérdida de la memoria y confusión, algo que afecta la interacción social. Por lo general, aparecen después de los 60 años, aunque algunas personas los manifiestan de forma prematura.
Normalmente, la gente asocia estos trastornos cuando alguien es olvidadizo y despistado, pero no todo el mundo sabe cuáles son las señales tempranas. En el portal The Mirror, el Dr. Tez Pratap Singh, médico MBBS de Drcure.com, explicó que además de esto, hay otros signos de demencia que son más sutiles y menos detectables, por lo que invitó a las personas a estar atentas.
Signos tempranos
En el citado medio, el doctor Tez Pratap Singh indicó que los síntomas pueden variar de una persona a otra, aunque indicó que hay cuatro signos tempranos, entre los cuales se encuentran los siguientes:
1. Problemas de lenguaje: la persona no encuentra las palabras adecuadas para expresar sus ideas, ya sea de forma hablada o escrita. Se le olvida cómo hallar términos para comunicarse. Si esto pasa, hay que ir al médico.
2. Extraviar artículos con frecuencia: según el doctor Singh, algo que muchos ignoran, es cuando se olvidan objetos con frecuencia y no sabes “volver sobre los pasos para encontrarlos”. Ser incapaz de recordar dónde estaba el objeto por última vez es una alerta.
3. Mal juicio: el experto indicó que otra señal temprana de demencia es la falta de juicio, “tomar decisiones inapropiadas o caer fácilmente en estafas”.
4. Retraimiento social: la persona con demencia suele ser retraída en lo social, ya sea en su tiempo libre o en su sitio de trabajo. Hay dificultad para conversar, están confundidos, así que prefieren apartarse.
Si detectas algunas de estas señales tempranas, así sea en algún ser querido, lo importante es acudir a un médico. Aunque la demencia no es curable, sí puede tratarse para minimizar su impacto.