Por Zöe Massey
La comida de la India llegó a mí hace unos 12 años por primera vez. Mi querido chef casi personal me engrió un cumpleaños con sabores que reventaban en el paladar, con mezclas de dulces, salados y picantes. Olores que llegaban directo a mi cerebro corazón y finalmente a mi panza feliz. Desde entonces se ha convertido en una de mis favoritas la sensación que queda en mí al disfrutar cómo estos sabores me llevan, traen y juegan con mis sentidos. Sí, ¡sigo hablando de comida!
Un viaje de 10 metros (The 100 Foot Journey) es una película bonita, emocionante, con una fotografía casi tan exquisita como los platos servidos en ella. Una historia de sueños, retos, de risas y de amor, con personajes muy ricos. Es un cine fácil, suave, que vale la pena ver. Y si tienes la suerte de que no te toquen personas que conversan a tu lado, viajas dentro de ella con facilidad.
Con respecto a los conversadores del cine… si tanto les gusta hablar, ¿por qué no se quedan en su casa, compran el DVD, ven TV, pagan Netflix y así no le arruinan la película al resto? ¿Es tan difícil respetar los espacios ajenos como para no patear el asiento de adelante, no contestar el teléfono y decir susurrando ‘essstoy en el ciiineee’? A mí me tocó una pareja de narradores que se iban contando la película tanto que pensé que uno era invidente o analfabeto y el otro lo ayudaba, pero no, solo repetían todo lo que iban viendo.
Al terminar la película me quedé salivando por comida de la India. De haber sido más temprano me iba corriendo al Gurú en Higuereta, (altamente recomendable, pero mosca con el picante). Sin embargo, al prender la luz, me despertó otra realidad, la del espectador de cine: ¿de verdad comen así en sus casas? La canchita queda tirada en todos lados, pareciera que todos son primos de Cookie Monster que se lanzan la comida al aire a ver qué entra a la boca.
Envolturas de dulces, galletas, vasos de gaseosas en el piso. Me sorprende la sorpresa del que limpia la sala cuando me ve saliendo con mi caja de canchita y vaso en mano buscando un tacho para botarlos. No recuerdo quién me enseñó a hacer eso o si me nace porque en mi casa, por más desordenada que soy, no ando botando comida al piso y esperando que alguien la recoja por mí. ¿Tú sí?
Entonces, si quieres cine bonito, anda a ver a Hellen Mirren haciendo otro papel maravilloso. Te recomiendo no ir tan tarde para que cuando salgas de ahí pensando en ir a comer algo con mucho curry no te pase lo que a mí, que ya estaba cerrado El Gurú.
Un viaje de 10 metros. Director: Lasse Hallström. Elenco: Helen Mirren, Om Puri, Manish Dayal, Charlotte Le Bon. Restaurante El Gurú: Av Benavides 3796, Surco Teléfono: 273-5658