Aleks Syntek: “No es cursi hablar de amor”

Conocido en toda Latinoamérica desde los años ochenta por participar en el programa Chiquilladas de Televisa, su carrera artística dio un giro posteriormente al pasar al rock y el pop. Este músico mexicano se presentará por primera vez en Lima el próximo 20 de setiembre.

Por José Barreto

Es conocido como `El Maestro’. Desde muy temprana edad, el mexicano Raúl Escajadillo o Aleks Syntek, de 44 años, fue un pionero de la música pop latinoamericana. Canciones como “Te soñé”, “Tú necesitas, Sexo, pudor y lágrimas” se han convertido en el soundtrack de muchas vidas en nuestra región.

Syntek ofrecerá un show en el marco del Lima Music Fest donde también cantarán Kalima, Samo y Reik el sábado 20 de setiembre en el Estadio Nacional y promete ser bastante generoso. “Haré un setlist muy nutrido. Quiero dejar complacidos a todos”, nos comenta por teléfono desde México.

Esta es tu primera vez en Lima, te quitarás el clavo de la postergación de junio… Sí, por fin se me va a hacer realidad el deseo de cantar en el Perú. Me agrada la idea de que sea así, en un festival, que sea masivo.

¿Te comunicas mucho con tus fans peruanos? Por las redes sociales me doy cuenta de que en el Perú se escuchan mucho mis canciones. Siento mucho entusiasmo en los comentarios que me hacen en Internet.

Muchos de los que te escuchan no saben que fuiste actor y comediante de niño… Sí, me llegó temprano. Tenía 10 años y en realidad fue por pura casualidad que llegué a la TV. Creo que no puedo decir que lo hice profesionalmente, pero me divertí.

¿Y en esos años descubriste tu lado musical? Siempre tuve la vocación musical, pero fue a los 11 años que decidí agarrar mi rumbo por ahí. Desde muy joven, a los 16 años, ya producía profesionalmente. Para la gente de música de esa época, yo era un niño prodigio porque fui de los primeros en usar las computadoras y secuencias, cuando lo normal era hacerlo en vivo y de manera analógica. Me hice de muy buena fama.

¿Te afectó el haber hecho comedia en TV cuando agarraste tu rumbo musical? Fue un obstáculo a vencer, porque había mucho escepticismo. Yo llegaba a las disqueras y me decían tú eres comediante, aquí no vengas a molestar. No creían mucho en mí. El gremio del rock mexicano también me cerró las puertas. Comencé a tocar con una banda que se llamó Kenny y los Eléctricos en sitios bastante underground. Había muchas burlas pero aquí me tienes. Este año cumplo 25 años de discografía y estoy cosechando mi trabajo.

¿Uno de los que se burlaba era Alex Lora? Él se burla de todo (risas). Es mi amigo, nos queremos mucho, pero en esos años sí me molestaba bastante. Le hacía mucha gracia ver al niño de Chiquilladas tocando en lugares de rock muy pesado. A mí me consideraba un niño fresa. Pero por la música uno es capaz de meterse en cualquier aprieto.

*Tú necesitas y Nuestro jardín tienen un origen común, cuéntanos de eso… * Mis canciones reflejan casi siempre mi vida. Tú necesitas habla de cómo conocí en una discoteca a la que es hoy mi esposa. Por eso digo, no puede ser que nadie te vio, estabas ahí en la soledad. Y Nuestro jardín es una canción con la que le pedí que se casara conmigo. Siempre tengo una canción para mi pareja en todos mis discos.

¿Dejarías la música por ella? Lo he hecho en cierto momento, cuando estuvo enferma (tuvo cáncer). Cuando tengo que hacer mi papel de esposo, lo hago al 100%. Darle prioridad a mi rol familiar es mi sello personal. Es la esencia de mi vida. Antes de los escenarios y el aplauso, está mi familia. Veo que muchos artistas tienen problemas personales y los ventilan. He tratado de no caer en ese patrón.

¿Qué es el amor para ti? Se define por la forma en que lo abordas. He descubierto que no es necesario ser cursi para hablar de amor en la música. Y como hay tantos tipos de amor, escribo para que mis canciones puedan ser cantadas a una madre, a una pareja, a una hija. Eso me hace diferente en este negocio, siempre hay un mensaje oculto, algo más allá de lo que escuchas en mis canciones.

Has colaborado con muchos reconocidos músicos, pero ¿hay alguno con el que aún sueñes grabar? El maestro del pop en vida más importante es Paul McCartney. Ojalá la vida me lleve a conocerlo en persona.

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