Han pasado 25 años y la Game Boy sigue siendo una de las videoconsolas más importantes de todos los tiempos, que marcó el rumbo de las consolas portátiles.
Pese a llevar cuatro pilas AAA, era capaz de proporcionar horas continuas de juego. Otra característica que la diferenciaba es que se podía ver bien a plena luz del sol.
Además, nos trajo videojuegos entrañables como es el Tetris, Pokémon, The Legend of Zelda: Link’s Awakening, Super Mario Land 2, Donkey Kong y un larguísimo etcétera.
No olvidemos el cable Link, básico en cualquier poseedor de esta videoconsola, permitiendo a dos jugadores conectarse para intercambiar archivos o jugar uno contra el otro: Pokémon, Tetris, etc.
Al igual que los Pokémon, la Game Boy original fue evolucionando hacia unas versiones más ligeras y con mayor autonomía. Game Boy Pocket, Game Boy Light, Game Boy Color, Game Boy Advance, Game Boy Advance SP y Game Boy Micro completan la familia.
Es inevitable recordar la Game Boy y a la vez posicionarte en una época pre-internet, donde los niños eran más ingenuos, y utilizaban este dispositivo para introducirse en un universo ficticio lleno de aventuras, contrastando su realidad.
25 años después Nintendo sigue dominando el mercado de las consolas portátiles con la 3DS, pero ahora el enemigo en esta ocasión no es ni SEGA, ni tampoco Sony, sino la proliferación de los smartphones y tablets.