Además de ser un fanático de la serie, el actor Johnny Depp tuvo otra buena razón para estar emocionado de hacer equipo con el director Tim Burton en la adaptación cinematográfica de Sombras tenebrosas, donde encarna a un vampiro que ha sido enterrado 200 años.
El actor ha notado una tendencia preocupante en la imagen que se tiene de los vampiros, tras el éxito de la saga Crepúsculo. ‘Fue durante el rodaje de Sweeney Todd que le comenté a Tim que deberíamos hacer una película donde un vampiro se vea como tal’, recuerda.
Depp y Burton han hecho juntos ocho películas y comparten una afinidad por los elementos oscuros de las películas de terror. ‘Desde niño tenía fascinación por los vampiros y los monstruos porque envuelven misterio e intriga’, explica Depp. ‘Cuando creces, ya te das cuenta que lo erótico detrás del vampiro es la idea de un muerto viviente’.
Entonces, ¿cómo se ve un vampiro según Burton y Depp? Con piel pálida y largos colmillos, claro, pero Johnny también tuvo que usar prótesis para alargar sus dedos y tener uñas puntiagudas.
‘En todas las películas que he tenido la suerte de hacer con Tim, siempre hay una forma de tortura. Esta vez fueron las uñas’, dice. ‘Eran tan largas como un dedo, necesitaba asistentes que me ayudaran cuando tenía que ir al baño’, bromea.
Y luego están los dientes. La película presenta a Barnabas Collins, interpretado por Depp, despertando en 1972 tras estar enterrado por dos siglos.
Quienes la pasaron peor fueron los obreros de construcción que lo desentierran en la ficción y terminan convertidos en su cena. ‘Me sentí como si estuviera mordiendo a uno de los Village People’, cuenta Depp acerca de su primer asesinato como vampiro.
‘Cuando tenía los colmillos puestos, trataba de ser muy cuidadoso, de no morderles de verdad. Algo así como cuando me tocó afeitar a Alan Rickman en Sweeney Todd, experiencia que ninguno de los dos quiere volver a repetir’, asegura.