Uno de sus mayores éxitos es “Yesterday”, pero el ex Beatle Paul McCartney celebra el lunes su 70º cumpleaños sin regocijarse en su pasado, pocos meses después de una nueva boda y de un nuevo álbum.
La jubilación no está a la vuelta de la esquina para este veterano del pop. Tras su estelar actuación en el macroconcierto del Jubileo de Diamante de la reina Isabel II, cerrará la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos el 27 de julio.
“Dado que me gusta realmente lo que hago, ¿por qué debería jubilarme?”, se preguntaba el año pasado en la revista musical Mojo. “La gente me dice: ‘Usted trabaja mucho’. Pero nosotros no trabajamos tanto, hacemos música”, bromea.
“Macca”, como lo llaman cariñosamente los británicos, sacó en febrero Kisses on the Bottom, el más reciente de una quincena de álbumes en solitario, y acaba de terminar una gira mundial.
El secreto de la juventud de este abuelo hay que buscarlo tal vez en su boda en octubre pasado con la estadounidese Nancy Shevell, de 51 años. Un tercer matrimonio que le permitió olvidar su tormentoso y costoso divorcio de Heather Mills en 2008.