La pasión por la fotografía no tiene límites y el caso de Amy Hildebrand es un ejemplo auténtico. Ella nació ciega a causa del albinismo en Estados Unidos, pero logra distinguir algunos colores y formas, detalla la página BBC Mundo. A pesar de sus limitaciones, decidió empezar un curioso proyecto desde el 2009: publicar 1 000 fotografías en 1 000 días en su blog With Little Sound.
‘Para mí, la época más complicada de fotografiar fue cuando mi padrastro fue diagnosticado con cáncer. Desde su muerte intento ser más positiva’, declaró a la BBC.
‘Quiero ser reflejada sólo como una persona, alguien que va a crecer, tener hijos, envejecer y morir. No todos mis días serán buenos, ni todas mis fotos serán buenas, pero van a reflejar lo que soy’, compartió en su blog.