Berlín. El ministro de Asuntos Exteriores turco, Mevlüt Cavusoglu, señaló en una entrevista que publica hoy el diario alemán “Süddeutsche Zeitung” que no existen motivos para que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, no se reúnan.
Cavusoglu confirmó al diario que Bin Salman preguntó a Erdogan en una conversación telefónica si podrían reunirse en Buenos Aires durante la cumbre de líderes del G20.
“La respuesta de Erdogan fue: ‘Vamos a ver’”, dijo el ministro, quien afirmó que “actualmente no existe ningún motivo para no reunirse con el príncipe heredero”.
A la pregunta de si espera mayor claridad tras la reunión, señaló: “Eso espero, pero no estoy seguro”.
Agregó que no sabe por qué el presidente estadounidense, Donald Trump, es ambiguo respecto al príncipe heredero, al que muchos consideran el responsable de la muerte del periodista Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Estambul y dijo desconocer si Estados Unidos está en posesión de información que su país no tiene.
“Un ‘quizás’ no es suficiente, tenemos que estar seguros”, agregó respecto a las sospechas que pesan sobre Bin Salman.
En general, señaló que Turquía no cree que el comando que asesinó a Khashoggi en el consulado en Estambul actuara por iniciativa propia.
“Eso es seguro. No se atreverían. Pero sin pruebas no puedo decir nada”, añadió.
Subrayó que quedan muchas otras preguntas sin responder, como quién prestó ayuda “in situ” al comando que asesinó al periodista y dónde está el cuerpo sin vida de Khashoggi.
“Los investigadores saudíes querían informaciones de nuestra parte, pero no nos dieron nada a cambio”, criticó.
Respecto a las grabaciones de audio, de las que Cavusoglu no detalla la procedencia porque “los servicios secretos no revelan sus fuentes”, el ministro afirmó que se desprende que Khashoggi fue asesinado en siete minutos y que se trata de un “homicidio premeditado”.
“No decidieron matarlo sólo después de que no lograran convencerlo de regresar. Se oye cómo el forense instruyó a los otros a escuchar música mientras él trocea el cuerpo. Se nota que lo disfruta”, aseguró Cavusoglu.
EFE