París (Francia). El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció hoy que retomará a partir de enero de 2019 su controvertida reforma constitucional suspendida el pasado verano por la crisis abierta por el “caso Benalla”, el exjefe de seguridad del mandatario investigado por actos violentos.
El dirigente francés hizo este anuncio en un discurso ante el Tribunal Constitucional para celebrar los 60 años de la Carta Magna, en plena tensión política debido a la dimisión esta semana de su ministro del Interior, Gérard Collomb.
“Estoy convencido de que el Gobierno, dialogando con la Asamblea Nacional y el Senado, encontrará la forma de hacer progresar inteligentemente esta reforma”, manifestó el jefe de Estado.
Macron, quien vive el momento más bajo de popularidad desde que tomó posesión del cargo en mayo de 2017, citó algunos de los ejes de esa modificación de la Carta Fundamental, como una despolitización del nombramiento de los miembros de la Fiscalía, y tejió elogios a la Constitución de 1958.
Esta reforma, una promesa electoral de Macron, también pretende acabar con el tribunal especial para miembros del Gobierno, inscribir la especificidad de Córcega en la Constitución o la defensa del medioambiente entre los principios fundamentales de la República.
Esta amplia modificación tiene previsto además reducir el número de parlamentarios un punto que ha generado roces en las dos cámaras, limitar sus mandatos e introducir parte de diputados por porcentaje de voto nacional y no por circunscripciones, para evitar la pérdida de poder de los partidos que tienen menos concentrado el electorado.
Los cambios deberán ser adoptados de forma definitiva en 2019, bien por una mayoría cualificada de diputados y senadores, de tres quintas partes, la opción preferida por Macron, bien por referéndum.
Durante su discurso de media hora, el presidente francés aludió veladamente al mal momento que vive, pues ha perdido tres ministros en un mes y medio y lidió con el “caso Benalla” en julio, y aseveró que un presidente tiene que estar listo a remar “ante los vientos contrarios”.
Por la mañana, el jefe de Estado había homenajeado a Charles de Gaulle, exjefe de Estado y promotor de la Carta Magna francesa de 1958, en una visita a Colombey-les-Deux-Eglises (este).
Macron se desplazó a esta localidad, en la que yacen los restos mortales del general De Gaulle (1890-1970), para rendirle tributo por su imprescindible contribución a la Constitución de la V República promulgada en 1958 y que, a pesar de varias modificaciones, sigue hoy vigente.
“No creo que (el presidente) personalice demasiado el poder. Parafraseando al General (De Gaulle), aquellos que se agitan como niños en sus sillas para reclamar una VI República simplemente no aprecian el Estado”, dijo ante los periodistas el mandatario, en alusión a las propuestas de cambio de régimen hachas por una parte de la izquierda.
Fuente: EFE