Una investigación de Naciones Unidas determinó que las fuerzas militares leales al presidente Bashar al-Asad lanzaron al menos dos ataques químicos en Siria y que el grupo yihadista Estado Islámico usó gas mostaza como arma.
Según el reporte, los tres ataques fueron realizados entre 2014 y 2015. Los investigadores no pudieron identificar a los autores de otros seis casos.
La ONU creó el panel investigador tras ataques con cloro en tres pueblos sirios al norte del país que dejaron 13 muertos.
El gobierno de Asad ha negado en reiteradas ocasiones haber usado armas químicas en el conflicto en Siria pero la ONU asegura tener suficiente información para respaldar sus afirmaciones.
Fuente: AFP