Decenas de manifestantes contra el presidente de Venezuela Nicolás Maduro intentaron el jueves llegar hasta la sede del gobierno pero fueron repelidos por la Policía.
Al grito de “tenemos hambre” o ‘este gobierno va a caer’, los manifestantes bloquearon una estratégica avenida y calles cercanas al Palacio de Miraflores.
Pero fueron rodeados por cientos de efectivos de la Policía Nacional y de la militarizada Guardia Nacional Civil Bolivariana.
La policía apeló a gases lacrimógenos para dispersar la protesta.
Golpeada por el desplome de los precios del crudo, Venezuela sufre una profunda crisis política, social y económica, con escasez de alimentos y medicinas, y una inflación proyectada por el FMI en 700% para 2016.