Un equipo de arqueólogos japoneses y peruanos halló un nuevo geoglifo, de unos 2.000 años de antigüedad, en el desierto de Nasca, al sur de Perú, informó el jueves a la AFP el ministerio de Cultura.
“El motivo figurativo fue descubierto por una misión dirigida por el investigador Mazato Sakai, cerca de la quebrada Majuelos, a unos 12 kilómetros del lugar donde se encuentran las líneas o geoglifos de Nasca”, señaló el arqueólogo Johny Isla, responsable del Patrimonio de Nasca del Ministerio de Cultura y encargado de supervisar los trabajos en la zona.
“Han identificado un motivo figurativo, que no es muy visible. No se sabe si son figuras zoomorfas o antropomorfas porque están bastante erosionadas. Es un descubrimiento de fines de 2015”, detalló a la AFP Isla.
El hallazgo se divulgó en la reciente edición española de la revista National Geographic, en el marco de los trabajos de investigación que realiza desde hace siete años Sakai con un equipo de la universidad japonesa de Yamagata.
Según la edición electrónica española de National Geographic, la figura hallada se encuentra trazada en un terreno árido y tiene una extensión de unos 30 metros de largo.
La figura representaría un “animal (imaginario) con la lengua larga”, según el arqueólogo Masato Sakai, quien sostiene que “tendría una antigüedad de 2.000 a 2.500 años”.
Isla precisó que “es difícil distinguir qué figura representa, por eso pierde impacto (el hallazgo)”. También aclaró que el ministerio de Cultura “supervisó los trabajos, pero no participó en la investigación”.
“Desde el punto de vista científico el geoglifo no aporta mucho”, estimó, y recordó que el equipo japonés descubrió en julio de 2015 otros 24 geoglifos en el desierto de Nasca.
Las famosas Líneas de Nasca son geoglifos de más de 2.000 años de antigüedad con figuras geométricas y de animales, que sólo pueden ser apreciadas con vista aérea. La Unesco las declaró Patrimonio Cultural y son una de las joyas del turismo en Perú.