La justicia holandesa juzgó que los textos originales del Diario de Ana Frank pueden ser copiados para la investigación científica, dirimiendo una disputa legal en torno a los derechos de la obra.
El Fondo Ana Frank, cuya sede está en Basilea (Suiza), es propietaria de la obra de la joven judía. Pedía al tribunal impedir a la Fundación homónima, que gestiona sobre todo la casa-museo de Amsterdam, publicar los textos en el marco de una investigación científica.
Pero el tribunal de Amsterdam estimó que estos pueden ser copiados por la Fundación y la Academia Holandesa de Ciencias, se informó el miércoles.
La sentencia no altera en cambio la duración de los derechos de autor, puesto que la Fundación y el Fondo se pusieron de acuerdo sobre el derecho aplicable en Holanda.
El “Diario de Ana Frank”, escrita por una adolescente judía entre junio de 1942 y agosto de 1944 mientras se escondía de los nazis con su familia en Amsterdam, fue publicada por primera vez en holandés por su padre en 1947 y luego traducida a más de 70 idiomas.
Legalmente, una obra pasa a dominio público el 1 de enero que sigue a los 70 años de la muerte de su autor “o del último autor vivo”.
El Fondo estima que el texto es una “obra póstuma”, publicada después de la muerte de Ana Frank en 1945 a los 15 años, en el campo de concentración alemán de Bergen-Belsen.
“Algunas partes del texto fueron publicadas en Holanda por primera vez en 1986. Serán protegidas hasta el 1 de enero de 2037, es decir, 50 años después de su publicación inicial”, indicó a la AFP uno de los miembros del consejo de administración del Fondo, Yves Kugelmann.
“En su decisión, el tribunal tuvo en cuenta dos derechos fundamentales: los intereses del Fondo en el mantenimiento de los derechos de propiedad intelectual y la libertad de investigación científica”, afirmaron los jueces en la sentencia publicada en internet.