Barack Obama llama a unirse en la lucha contra el Estado Islámico

El mandatario estadounidense señaló en la ONU que el único idioma que entienden los yihadistas es “el lenguaje de la fuerza”. Miles de kurdos sirios huyen a Turquía ante el avance de los yihadistas

El presidente estadounidense Barack Obama sumó el miércoles nuevos aliados en su coalición internacional contra los yihadistas del movimiento Estado Islámico (EI), tras formular un dramático llamado de unidad en la Asamblea de la ONU frente a ese grupo que decapitó a un rehén francés en Argelia.

Bélgica y Holanda anunciaron que se sumaban a la coalición internacional con el despliegue de seis aviones de combate F-16 cada uno, uniéndose a Francia y varios países árabes que ya participaban en bombardeos aéreos contra el EI en Irak y Siria.

“Estados Unidos trabajará con una amplia coalición para desmantelar esta red de la muerte. Hoy le pido al mundo sumarse a este esfuerzo”, dijo Obama durante su discurso en la apertura de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.

El mandatario estadounidense señaló que el único idioma que entienden los yihadistas es “el lenguaje de la fuerza”, defendiendo así la decisión de su país de bombardear las posiciones de los yihadistas.

Los bombardeos continuaron el miércoles, un día después de que Washington dirigiera una serie de 16 ataques sobre suelo sirio los primeros contra este territorio, con sus aliados árabes (Jordania, Bahréin, Catar, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos).

En su discurso, Obama no buscó figuras retóricas para su mensaje: “El grupo terrorista conocido como EI debe ser debilitado y finalmente desmantelado. Este grupo ha aterrorizado a todos los que se cruzan en su camino en Irak y en Siria”, dijo.

Poco después de que concluyera su mensaje, un grupo yihadista argelino vinculado al EI, Yund al Jilafa, reivindicó con un video la decapitación de un francés secuestrado el pasado domingo, y cuyo asesinato siguió a un ultimátum para que Francia dejase de participar en los ataques aéreos en Irak.

El presidente de Francia, François Hollande, denunció la ejecución de Hervé Gourdel, de 55 años, como un “asesinato cruel y cobarde” y adelantó que Francia continuará apoyando las acciones militares contra el EI.

“Francia vive una prueba con el asesinato de uno de nuestros compatriotas, pero Francia no cede jamás ante el chantaje”, dijo Hollande durante su discurso.

“Detener crímenes atroces”

Ya en la apertura de la sesión de la 69ª Asamblea General de la ONU, el secretario general de la entidad, Ban Ki-moon, trazó un sombrío panorama internacional, para apuntar que 2014 era “un año terrible” en materia de protección de los derechos humanos.

“Ha sido un año terrible para los principios consagrados en la Carta de Naciones Unidas. Desde bombas improvisadas a decapitaciones, desde hambrunas forzadas de civiles al ataque de hospitales, refugios y convoyes de la ONU, los derechos humanos y el estado de derecho están bajo ataque”, lamentó Ban.

En medio de la frenética actividad diplomática, el Consejo de Seguridad de la ONU, reunido en sesión extraordinaria presidida por Obama, adoptó una resolución unánime para frenar el flujo de yihadistas extranjeros a Siria e Irak y responder a la amenaza que representan para sus países de origen.

La resolución impone a los países, bajo pena de sanciones, impedir a sus ciudadanos enrolarse en organizaciones extremistas como el EI.

Obama dijo que los expertos estiman que 15.000 combatientes extranjeros procedentes de más de 80 países se han sumado en los últimos años a organizaciones extremistas en Irak y Siria.

Voces latinoamericanas

En tanto, la presidenta de Brasil, Dilma Roussef, condenó la generalización del uso de la fuerza, y alertó que los instrumentos de la comunidad internacional se muestran incapaces de resolver problemas.

Ese recurso a la fuerza armada ha conducido a una “trágica proliferación en el número de víctimas civiles y catástrofes humanitarias. No podemos permitir el aumento de estos actos de barbarie, que hieren nuestros valores éticos, morales y civilizatorios”, dijo.

A su turno, la mandataria chilena Michelle Bachelet advirtió de la “amenaza” para los derechos humanos que significa el “ciclo de crisis” en lugares como Siria, Irak o Gaza.

“Esta inestabilidad amenaza la paz, la seguridad, los derechos humanos, el desarrollo, la democracia. Es decir, todo aquello en que creemos y que constituye la base del acuerdo que dio origen a Naciones Unidas”, señaló Bachelet.

El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció de su lado el regreso de su país a las misiones de mantenimiento de paz de la ONU y colocó las recientes reformas llevadas a cabo a nivel nacional como ejemplo de la modernización que, según él, necesita ese organismo.

Lo Último