En la sentencia, disponible en el sitio web del tribunal, el juez Frederico Maciel explica que el acusado fue detenido tras entrar en el principal presidio de la capital brasileña con 52 dosis de marihuana en el estómago, y que cuando fue amenazado por los guardias, confesó y las vomitó.
Ante el hecho flagrante, el abogado de la defensa pidió la pena mínima de cárcel.
Pero Maciel decidió absolverlo al considerar que “la prohibición de sustancias estupefacientes recreativas, como el tetrahidrocannabinol (principal compuesto psicoactivo del cannabis y término usado por el juez ya que consta en la legislación) son fruto de una cultura atrasada” que además “viola el derecho a la igualdad, restringiendo el derecho de una gran parte de la población”.
“Suena incoherente el hecho de que otras sustancias estupefacientes como el alcohol y el tabaco, no solo son permitidas y vendidas, generando millones de ganancias para los empresarios de esos ramos, sino además consumidas y adoradas por la población”, mientras que la marihuana o tetrahidrocannabinol está prohibido, indicó.
La sentencia data de octubre, aunque solo fue dada a conocer este miércoles por el diario Correio Braziliense, tras la polémica que comienza a causar entre policías y otros organismos oficiales, dijo el rotativo.
El juez destacó que el estado estadounidense de California permite su uso medicinal, los de Washington y Colorado su uso recreativo, en España el consumo, y Uruguay se encamina a regular su venta y uso.
La Fiscalía recurrió esa decisión y el caso está ahora en la segunda instancia, informó un portavoz de ese organismo a la AFP.
En su parecer, la Fiscalía argumenta que “la definición de cuáles son las sustancias consideradas como droga pasa por un criterio jurídico-técnico-científico, y no cabe al juez ignorar tal criterio para decidir lo que debe ser considerado o no como sustancia estupefaciente prohibida”