“Estas estadísticas sugieren que la diabetes tipo 2 o adulta puede haber alcanzado la situación de alerta en la población china”, advierten los autores del informe, entre ellos el doctor Xu Yu, de la Universidad de Shanghai.
Los expertos señalan “la posibilidad a corto plazo de una epidemia con complicaciones asociadas a enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebovascualres y disfunción renal crónica, y sin recursos nacionales para enfrentarla”.
La proporción de personas con pre-diabetes alcanzó además el 50% de los adultos chinos.
“La prevalencia de diabetes ha aumentado significativamente en las últimas décadas en China hasta llegar a casi el 12% de los adultos en 2010”, dijo Xu, que dirigió la investigación publicada en la revista estadounidense Journal of the American Medical Association (JAMA), de fecha 4 de septiembre.
“Esta prevalencia era inferior al 1% en 1980, llegando al 2,5% en 1994 y al 5,5% en el período 2000-2001, antes de casi duplicarse en 2007, con el 9,7%”, dijo el investigador citando encuestas epidemiológicas.
La influencia del desarrollo económico
En esta última investigación, los autores midieron la concentración de glucosa en la sangre de una muestra de 98.658 adultos chinos representativos de la población general en 2010.
La prevalencia de la diabetes se estima en 11,6% de los adultos del país, mayor entre los hombres (12,1%) que entre las mujeres (11%). La prevalencia de los nuevos casos diagnosticados se situó en el 8,1% durante el mismo período.
La frecuencia de la diabetes fue mayor en las zonas urbanas tanto para hombres como para mujeres, señalaron los investigadores.
El número de casos de diabetes aumenta con la edad en ambos sexos, en los hombres entre los mayores de 50 años, y en las mujeres entre las mayores de 60.
Por otra parte, la prevalencia de la diabetes, como el sobrepeso y la obesidad, aumenta con el desarrollo económico, destacaron los investigadores.
También señalaron que la proporción de personas que sabían que padecían diabetes fue de 30,1% en la población general, de los cuales sólo el 25,8% recibía tratamiento. En este grupo sólo el 39,7% efectivamente controlaba el grado de azúcar en la sangre.
“Un reto social”
En un editorial que acompaña este estudio clínico publicado en JAMA, la doctora Juliana C.N. Chan, de la Universidad China de Hong Kong, describe la diabetes como “un reto social y para el sistema de salud complejo, ya que resulta de otras interacciones genéticas y ambientales”.
“La rápida modernización creó un ambiente propicio a la obesidad caracterizado por la abundancia de alimentos, la inactividad física y el estrés psicológico”, añadió.
En Estados Unidos, donde un tercio de los adultos son obesos, la diabetes también tiene proporciones epidémicas: un 8,3% de la población, o 25,8 millones de personas, padecen esta enfermedad, según las últimas cifras oficiales de 2010. De estos, siete millones (27%) son conscientes de su condición.
Además, 79 millones de adultos estadounidenses son pre-diabéticos, según estas estimaciones.
El costo total de los tratamientos se estima en unos 174.000 millones por año.
La mortalidad de los adultos debido a la diabetes se ha duplicado en el mundo desde 1990 a 2010, alcanzando 1,3 millones de muertes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).