Unos fanáticos del Lego y de los trenes decidieron dar rienda suelta a su imaginación y crearon esta pista de tren, considerada la más larga del mundo.
Henrik Ludvigsen de Roskilde, Dinamarca, junto a un equipo de 80 personas pasaron 18 meses haciendo el diseño de la pista que mide más de 4 mil metros, y en la que emplearon más de 93 mil piezas de Lego.
Su trabajo ya entró al libro de los récord Guinness.