Un ritual judío posterior a la circuncisión, por el cual quien oficia la ceremonia succiona la sangre del pene del recién nacido, causó la muerte por herpes a dos niños e infectó a otros 11 en Estados Unidos, dijeron autoridades sanitarias el jueves.
Las infecciones del virus del herpes simple (HSV-1) se registraron en Nueva York entre 2000 y 2011, varias incluso dentro del mismo barrio, según el informe al Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Seis casos fueron confirmados y el resto considerados probables, ya que los niños se sometieron al procedimiento religioso, pero sus madres y los enfermeros y médicos que los atendieron en el hospital no tenían el virus, que es común en adultos pero puede ser letal en niños.
“La succión oral de una herida abierta es un riesgo inherente para la transmisión del HSV-1 y otros patógenos a un recién nacido y no es segura”, señaló el informe semanal sobre morbilidad y mortalidad del CDC.