Podría ser tu abuela, pero es una actriz porno.
La pornografía de abuelos o gerontopornografía explora límites y rompe normas sociales en Japón.
‘Cada uno tiene una sexualidad distinta, y en Japón hay un género porno para todos. Hay gente a quien le gusta ver a personas de edad juntas’, señala Takuma Kawabe, realizador de películas porno.
Aunque algunos confiesan estar un poco oxidados, dicen que les gusta el sexo y ésta es posiblemente su última oportunidad de disfrutarlo antes de ser demasiado viejos.
‘Mi hija encontró el aviso en internet, decidí aplicar y aquí estoy’, dice Yasue, actriz porno debutante. ‘Tuve mucho sexo cuando era joven. Hoy tengo tiempo y quiero retarme a mí misma de muchas formas’.
Si el amor no tiene edad, estos actores demuestran que el sexo tampoco.
Las actitudes en relación al comercio del sexo y el porno en Japón son menos puritanas que en otros lados del mundo.
De hecho, entre un 20 y un 30% de las películas para adultos del país están protagonizadas por actores con canas y arrugas.