1. El MDMA es popularmente conocido como éxtasis, o ‘La droga del amor’. También es referido bajo el nombre de ‘Molly’ o ‘Mandy’, cuando se trata de su presentación más pura, en polvo o forma cristalina, según lo informado por la ‘CNN’.
2. Entre sus efectos, puede inducir a la euforia y a una sensación de intimidad hacia los demás. Además, disminuye la ansiedad y la timidez, convirtiendo a quien lo consume en un individuo más extrovertido, alegre, e incluso, hiperactivo.
3. Asimismo, aumenta la sensación de fuerza física y provoca una mayor resistencia al cansancio, por lo que ha sido frecuentemente popularizada en las fiestas de música electrónica conocidas como ‘raves’, donde los jóvenes tienden a bailar por muchas horas.
4. Al reducir la sensación de sueño, es capaz de producir episodios de insomnio a corto plazo, especialmente, cuando sus efectos desaparecen. Se ha comprobado que sus consumidores asiduos también son propensos a sufrir de insomnio a largo plazo.
5. El MDMA produce un efecto sobre sus consumidores, que podría explicarse como una regresión a la edad infantil, según el portal de la revista ‘The Times’. Quienes ingieren esta droga, olvidan sus responsabilidades y se divierten sin razonar como adultos.
6. Sus efectos también incluyen una mayor tensión muscular, la pérdida parcial del sentimiento de dolor físico, dilatación en las pupilas, tensión mandibular, lengua inquieta o presionada contra el paladar y algunos ‘tics’ corporales.
7. Sus consumidores también experimentan una sensación general de bienestar y felicidad absoluta, sin motivo alguno. Los sentidos se agudizan, y el sistema nervioso es sobre-estimulado, por lo que se genera una mayor empatía y actitud extrovertida.
8. En contraparte, ha sido penalizada a nivel internacional, por la Comisión Global de Políticas de Drogas, siendo restringida su posesión, fabricación y venta. Aun así, existen algunas excepciones para su investigación científica y médica.
9. Su consumo prolongado puede ser muy peligroso para la salud mental, ya que es capaz de conducir al individuo a cuadros de depresión severa, e incluso, adicción psicológica para evitar cualquier sensación posterior de tristeza o desgano.
10. Además, su uso continuo puede hacer que sus efectos, que duran entre seis a ocho horas, desaparezcan más rápido. Así, el consumidor necesita tomar una mayor dosis en menor tiempo, aumentando la descompensación de sus neurotransmisores.
11. Otros de sus efectos temporales están relacionados a la liberación de la serotonina, por lo que es posible que exista una pérdida del control de uno o ambos ojos del consumidor, el drástico aumento de su temperatura corporal, y deshidratación.
12. Entre los defensores de esta droga, según The Associated Press, se destacan diversos estudios en el campo de la psicología y la terapia cognitiva, que sugieren que facilita la superación del estrés postraumático y otros cuadros de ansiedad.