Mientras el mundo se ve envuelto en una pelea por la privacidad, BioGenFutures quiere mantener el ADN de las personas lejos de las manos de terceros. Al menos, esa es la aspiración que tiene la artista conceptual Heather Dewey-Hagborg, dueña de la empresa, que espera llevar la vigilancia de ADN nuevo a la palestra.
El nuevo producto denominado Invisible podrá borrar supuestamente todos los trazos de ADN que diariamente dejamos. Una solución que según la visión de la artista en unos cinco años será algo común.
“Invisible “ viene con dos aplicaciones, las cuales se pueden combinar para mantener su identidad a salvo de los tamizado por ello. El primero, “Borrar”, es esencialmente un producto de limpieza de laboratorio que supuestamente puede destruir el 99,5 por ciento de los materiales residuales. El segundo, “Reemplazar”, cubre hasta el 0,5 por ciento restante con material de ADN de otras fuentes. Dewey-Hagborg llama de alta seguridad en forma de spray.
Hace dos años Dewey-Hagborg mostró su preocupación por la posible vigilancia de ADN que podría existir en el futuro: un espionaje biológico. Que, según asegura, no está siendo discutido aún en la sociedad.
Con el producto las personas podrán limpiar de vasos, tenedores y de todo aquello que utilicen, los rastros de que alguna vez estuvieron ahí. Si bien, no elimina con totalidad los rastros, sí limita la posibilidad de que empiece la supuesta “vigilancia” biológica.
Por supuesto, el trabajo en sí es informado con conocimiento por el arte, y se basa en la hipérbole de teatro para ilustrar el futuro distópico que posiblemente podría pedir maneras de borrar los rastros de su ADN.
Por ejemplo, una sección del sitio descaradamente dice: “¿Cena con la futura familia política va sin problemas? No dejes que te juzguen en base a tu ADN, sé invisible”.
Sin embargo, Dewey-Hagborg cita también la aprobación de la Ley de No Discriminación por Información Genética (GINA) en 2008 y el caso más reciente del NYPD de intentar vincular a activistas del Ocupa Wall Street de un asesinato mediante pruebas de ADN en 2012, como ejemplos de los poderes que va asumiendo la genética y las razones de por qué los ciudadanos deben tener la opción de hacer su ADN más difíciles de rastrear.
El producto estará disponible a partir de junio de este año y será el comienzo de un sin límites de productos que tienen en mente. “Este es mi primer prototipo. Estos problemas continuarán emergiendo y se convertirán en parte de nuestras vidas”, informó Dewey-Hagborg a The Verge.