La segunda semana del mes de julio de 1981, era publicado en Japón el videojuego Donkey Kong, trabajo que quedó sin dudas en la historia por ser la primera entrega que dirigió el gran Shigeru Miyamoto. Sin embargo, el momento significó también el nacimiento de la mayor estrella que ha tenido Nintendo, Mario Bros., quien participó en dicho juego en un papel secundario.
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El viedo game se caracterizó por desarrollar las aventuras del gorila villano, quien se enfrentaba contra un tipo con bigotes y sobrero que eludía barriles y subía escaleras para rescatar a una princesa secuestrada. Dos años después, fue que apareció el videojuego de Mario Bros, quien le devolvió la gentileza a Donkey Kong, y lo mantuvo como uno de los personajes más resaltante de la entrega.
En dicha presentación apareció por primera vez su hermano, Luigi, además, es la primera vez que se llama Mario Bros, porque en realidad su primer nombre era “Jumpman”, un carpintero que luego pasó a ser para siempre un fontanero.
Inspiración en Popeye
Miyamoto indicó que la creación de Donkey y todo el mundo que lo rodeó, entre ello, Mario, fue un plan B, ya que el diseñador japonés quería comprar una licencia para crear un juego basado en Popeye, situación que finalmente no pudo conseguir. Entonces pensó reemplazos para los personajes de esa tira: la princesa ocupó el rol de Olivia, Donkey Kong apareció tan musculoso como Brutus, y Mario personificó al héroe.
Tras el lanzamiento de Donkey Kong, la compañía en la que trabajaba Miyamoto tuvo una batalla legal con Universal, debido a que el estudio de cine reclamó que el gorila se parecía mucho a su King Kong. Mucho tiempo después, el creador del juego reconoció que era cierto y que además, se inspiró en La bella y la bestia, de Disney.
