Los motivos del por qué una ex empleada de OpenAi denunció a Sam Altman

Helen Toner, ex integrante de la junta directiva, explicó los detalles en un podcast

Mediante una participación en la reciente primera semana de junio en el podcast, The TED AI Show, una ex empleada de OpenAI, aseguró que el CEO, Sam Altman, desarrolla cuestionable comportamientos de toxicidad en contra de los empleados de alto y medio rango en la empresa estadounidense, situación que ha hecho que muchos de éstos hayan sido despedidos u obligados a renunciar.

Helen Toner, quien perteneció hasta el pasado mes de noviembre en la junta directiva, destrozó al programador estadounidense al indicar que es el máximo responsable de un ambiente de trabajo tóxico y de desarrollar en varios niveles de “abusos psicológicos”.

Fuertes acusaciones

Hasta ahora, poco se sabe de los motivos del por qué Altman fue separado momentáneamente de su cargo en 2023, sin embargo, Toner, quien en la actualidad es directora de estrategia y becas en el Centro de Seguridad y Tecnología Emergente de la Universidad de Georgetown, en Estados Unidos, explicó algunos detalles que según ella, fueron los verdaderos motivos.

La mujer hizo referencia a las “constantes mentiras de Altman”, por ello, la junta habría dejado de confiar en él al enterarse de que ocultaba que era dueño de un fondo que invierte en empresas emergentes especializadas en inteligencia artificial.

Sobre más de la acusación de ocultar información relevante, Torner agregó: “cuando ChatGPT salió en noviembre de 2022, no se informó a la junta con anticipación. Conocimos al chatbot cuando su existencia se difundió en Twitter”. La mujer también aseguró que dos ejecutivos denunciaron casos de “abusos psicológicos” por parte de Altman.

La respuesta desde OpenAI no tardó en llegar y fue el presidente de la junta, Bret Taylor, quien defendió a Sam Altman: “Estamos decepcionados de que la señora Toner continúe revisando estos temas. Un comité independiente de la junta trabajó con el estudio de abogados Wilmer Hale para realizar una revisión exhaustiva de los acontecimientos de noviembre. La investigación concluyó que la decisión de la junta anterior no se basó en preocupaciones sobre la seguridad del producto, el ritmo de desarrollo, las finanzas de OpenAI o sus declaraciones a inversores, clientes o socios comerciales”.

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