La actriz Heba Magdi fue víctima de lo que muchos consideran la peor broma de la historia: ser secuestrado por el Estado Islámico.
Los supuestos terroristas, que ingresan violentamente al recinto donde aguardaba la actriz, forman parte de un programa humorístico egipcio. Las imágenes generaron polémica por la descontrolada reacción de la pobre Magdi.
En un momento de la escena, los hombres tratan de obligar a la actriz a ponerse un chaleco de explosivos, a lo que la mujer se resiste cubriéndose con una silla.
A pesar de que al final se revela la broma, la actriz no logra superar el shock vivido.