Después de al menos dos horas de lectura de la sentencia en el juicio contra el expresidente del Perú, Alejandro Toledo, se conoció el veredicto. La justicia cedió a la petición de la Fiscalía y dictaminó una condena de 20 años y 6 meses de prisión por los delitos de delitos de colusión y lavado activos en el caso Interoceánica Sur.
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El exmandatario insistió en su inocencia y al mismo tiempo solicitó a los magistrados ser investigado desde su casa argumentando problemas de salud. “Tengo cáncer, problemas en el corazón y, en pocos meses, voy a cumplir 80 años. Si es que esto va a continuar, lo único que les pido, por favor, déjenme defenderme desde mi casa... Por favor, déjenme curar o morir en mi casa”, expresó.
En la pausa solicitada por la magistrada Inés Rojas Contreras, el exdirigente se vio sonriente y saludando a algunos asistentes, pero estos gestos se borraron al escuchar la decisión de la justicia.
La reacción de Alejandro Toledo
Durante la lectura de la sentencia, el expresidente Alejandro Toledo vestido con casa negra y camisa blanca, miró fijamente al estrado y solo procedió a bajar la cabeza con la mano en la frente. Luego de mostró cabizbajo y conmovido.
En las redes sociales hubo reacciones diversas, desde la celebración hasta el rechazo a la decisión de la justicia por considerar que no hubo pruebas contundentes contra Toledo.
“Toledo es un chivo expiatorio. La caviarada lo sacrifica para aparentar que la justicia Peruana es “eficiente””, “Excelente, así quiero ver a Keiko y Pedro Castillo”, ”La justicia tarda pero llega”, “Es lo menos que merece. Era llamado para acabar de una vez por todas con el fujimorismo en el año 2000 y lo único que hizo es ayudarlo a mutar y a permanecer en el Estado peruano”, opinaron.
