MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El ala socialista del Gobierno considera que se está desenfocando el problema con la ley del 'solo sí es sí' y que se está enviando un mensaje confuso, en referencia al socio de la coalición, Unidas Podemos, según han indicado fuentes gubernamentales. Indican además que enviaron a sus socios la última propuesta para reformar esta ley este viernes a mediodía.
Así, señalan que el debate entre ambas formaciones no pasa por modificar la parte de la ley relativa al consentimiento y remarcan que los artículos relativos al mismo no se van a tocar. Por el contrario sostienen que el problema es la bajada de penas que califican como "gravísima".
Hace una semana la parte socialista del Gobierno anunció que llevaría a cabo una reforma de la ley del 'solo sí es sí' por los "efectos indeseados" que esta norma estaba generando y la alarma social que se había producido. Así, indicaron que estaban negociando con Unidas Podemos esta reforma, a través de una proposición de ley, aunque la presentarían en el Congreso en cualquier caso, también si no llegaban a un acuerdo con los morados.
De hecho se dieron de plazo para presentar la iniciativa legislativa hasta este viernes, aunque finalmente decidieron darse unos días más para apurar la negociación con el socio de coalición, que por el momento rechaza las opciones que le ofrece el PSOE.
Las fuentes gubernamentales consultadas afirmaron que enviaron su última propuesta este viernes a mediodía, por lo que es previsible que continúen negociando a lo largo de todo el fin de semana. Sin embargo, rechazan hablar de plazos y de cuánto van a esperar a Podemos, antes de dar el paso y presentar su iniciativa en solitario.
NO GENERAR FALSAS EXPECTATIVAS
Advierten además que no se pueden generar falsas expectativas con esta reforma de la ley del 'sólo sí es sí', que desde su entrada en vigor en el mes de octubre ha provocado la rebaja de sentencias a más de 400 condenados por delitos sexuales y decenas de excarcelaciones. Dejan claro que este problema continuará a pesar de la reforma, que solo afectará a los casos que puedan producirse a futuro, una vez que entre en vigor la nueva normativa.
Este viernes la ministra de Igualdad, Irene Montero, se manifestó al respecto al afirmar que la voluntad de Unidas Podemos en esta negociación con el PSOE es no renunciar a poner el consentimiento en el centro de la ley. "Quiero preservar la respuesta unitaria del Gobierno, pero desde luego, el consentimiento no se puede tocar", afirmó.
Asimismo, admitió la existencia de diferencias con los socialistas sobre "como reformar la ley y si se puede mantener el consentimiento como eje del Código Penal", según indicó.
Por el contrario, desde el PSOE consideran que se trata de mensaje confuso que desenfoca el problema, que para ellos se encuentra en la rebaja de penas y las graves consecuencias que ha tenido en los últimos meses.