El Departamento de Justicia estadounidense le pidió a Tesla entregar documentos relacionados con sus programas de conducción autónoma Autopilot y Full Self-Driving, según documentos presentados a reguladores.
“Hasta donde sabemos, ninguna agencia gubernamental en ninguna investigación en curso ha determinado que haya ocurrido ilegalidad alguna”, declaró Tesla en registros ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC).
El fabricante de vehículos eléctricos advirtió que si el gobierno decide tomar acción en su contra, ello podría impactar en sus negocios.
El Departamento de Justicia no ha comentado al respecto.
Tesla Inc., basada en Austin, Texas, enfrenta ya numerosas investigaciones de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) debido a problemas con sus programas de conducción autónoma Autopilot y Full Self-Driving.
Pese a los nombres que tienen esos programas, Tesla aclara en su sitio web que los carros no son totalmente autónomos. Los vehículos equipados con Full Self-Driving son capaces de conducirse por calles en muchos casos, pero los expertos dicen que el sistema puede cometer errores, algo que incluso el CEO Elon Musk ha reconocido.
“No estamos diciendo que están listos para usarse sin nadie al volante”, declaró Musk en octubre.
Los sistemas son investigados por la NHTSA desde junio de 2016, después que el conductor de uno de los vehículos con Autopilot murió cuando el carro pasó por debajo de un tráiler que se le cruzó en Florida. Se inició otra pesquisa en agosto de 2021, cuando un vehículo Tesla con Autopilot se impactó contra vehículos de emergencias. Por lo menos 14 Teslas se han estrellado contra vehículos de emergencias usando el sistema Autopilot.
La NHTSA ha despachado investigadores a 35 accidentes viales con vehículos Tesla en que al parecer se usaron sistemas de conducción automatizados. Diecinueve personas fallecieron en esos sucesos, incluyendo dos motociclistas.