DOHA (AP) — Pase lo que pase en el decisivo partido de Bélgica contra Croacia en la Copa Mundial el jueves y ganen o no los Diablos Rojos un gran título, el técnico Roberto Martínez afirmó que el legado de la “Generación Dorada” de la selección ha quedado firmemente establecido.
“Dejar un legado va más allá de ganar un torneo", dijo Martínez el miércoles. “Hay casos de otras selecciones que han conquistado torneos y no dejan un legado. Este grupo de jugadores se merece respeto, se merece admiración por lo que han logrado”.
Bélgica quedó tercera en el Mundial de 2018 y alcanzó los cuartos de final de las últimas dos Eurocopas.
Pero se esperaba mucho más de un equipo que ha acumulado muchos meses en la cima del ranking de la FIFA y que tiene astros de la talla de Kevin De Bruyne, Eden Hazard y Romelu Lukaku.
“Se está hablando de un grupo de jugadores que se fue de Bélgica cuando eran unos jovencitos para militar en los mejores clubes de Europa. Ganaron trofeos y siempre se mantuvieron comprometidos", dijo el entrenador español. “Tienes a ochos jugadores que superan las 100 internacionalidades. Está (el arquero) Thibaut Courtois que llega a su partido número 100 contra Croacia. Son jugadores que se sacrificaron por la selección".
“Esta generación es la generación dorada del fútbol belga”, añadió Martínez. “No cabe duda. Obtuvieron la medalla de bronce en 2018. Mantuvieron a la selección nacional como número 1 del ranking durante cuatro años, en un país con una población de 11 millones”.
Martínez también destacó que varios de los jugadores de su veterano plantel ya obtuvieron sus licencias para entrenar.
“Esta generación va inspirar al fútbol belga desde un aspecto técnico durante los próximos 20 años", indicó.