La frase “le salió el tiro por la culata” jamás había sido tan acertada luego de que un hombre en Dallas, Texas, Estados Unidos, muriera luego de ser alcanzado por la misma bala que había disparado contra una mujer, según informó la policía local.
La policía de Dallas anunció en un comunicado compartido en su blog que el pasado 30 de julio por la mañana, la Policía respondió a una llamada que alertaba de disparos en un edificio residencial de la ciudad texana, y cuando los oficiales llegaron al lugar, pudieron notar una gran rastro de sangre frente a un apartamento, sin embargo, dentro del domicilio no encontraron a nadie.
El hombre, de acuerdo al reporte, se llamaba Byron Redmon, de 26 años, y disparó contra una mujer no identificada en el cuello durante un tiroteo que aconteció el sábado.
Luego de dirigirse al lugar, las autoridades recibieron otro aviso sobre un hombre y una mujer que fueron hallados heridos en un automóvil cerca de un complejo hospitalario. La investigación posterior determinó que las dos llamadas estaban relacionadas.
Según determinaron los agentes, Redmon le había disparado a la mujer en el cuello pero la bala salió del cuerpo de la víctima y acabó impactando a Redmon en una pierna y causándole la muerte, por motivos que no han sido más detallados.
Un medio local, Dallas Morning News, informó, citando a un portavoz policial, que la mujer recibió atención médica y pudo ser dada de alta del hospital ese mismo día.
Por su parte, la policía de Dallas continúa investigando el caso, sin haber revelado detalles sobre las circunstancias del tiroteo y se desconoce si consideran que fue un accidente o intencional, aunque al medio estadounidense The Independent se les informó que el ataque se habría tratado de una disputa doméstica.