LONDRES (AP) — El líder del principal partido de oposición de Gran Bretaña indicó el lunes que renunciará si la policía lo multa por comer y tomarse una cerveza con colegas mientras el Reino Unido se hallaba en confinamiento por la pandemia de coronavirus.
Keir Starmer, líder del Partido Laborista, reconoció haber comido curry que pidió para llevar y haber tomado una cerveza en la oficina de un legislador en el noreste de Inglaterra en abril de 2021. Starmer insiste que la comida, que se llevó a cabo durante la campaña para una elección especial, era parte de una jornada laboral y no infringió ninguna norma.
Luego de días de reportes sobre el acontecimiento en los periódicos que apoyan a los conservadores, la policía local anunció que investigaría el incidente.
El lunes, Starmer dijo que era “absolutamente claro que no se infringió ninguna ley”.
“En todo momento se cumplieron. Simplemente comí algo mientras trabajaba tarde, como cualquier político haría días antes de una elección”, comentó. “Pero si la policía decide emitir una notificación de sanción fija, por supuesto que yo haré lo correcto y dimitiré”.
Starmer acusó a quienes lo atacan de “intentar alimentar el cinismo para que la población crea que todos los políticos son iguales”.
Los conservadores acusaron a Starmer de hipocresía porque pidió la renuncia del primer ministro Boris Johnson por fiestas que violaron las restricciones en oficinas gubernamentales. La policía multó a Johnson con 50 libras (62 dólares) por asistir a su propia fiesta sorpresa en su oficina en junio de 2020, cuando las normas de cuarentena prohibían las reuniones sociales.
Johnson ofreció disculpas pero niega haber violado las normas a sabiendas. Enfrenta la posibilidad de recibir dos multas más por otras fiestas y una pesquisa parlamentaria sobre si engañó a los legisladores respecto a su comportamiento.