TEL AVIV, Israel (AP) — Israel canceló los fuegos artificiales en su Día de la Independencia por temor a que las explosiones causen trauma a veteranos de guerra.
“El estruendo de los fuegos artificiales, para nosotros, suena igual que el ruido de la metralla en la guerra”, expresó Ehud Amiton, un exsoldado que sufre del síndrome de estrés postraumático y que ha hecho campaña para que los fuegos artificiales no sean parte de los festejos.
“No nos oponemos a los festejos, nos oponemos a los fuegos artificiales”, enfatizó el exsoldado en declaraciones a la Radio del Ejército.
Los festejos por el 74to aniversario de la independencia de Israel empiezan el miércoles al atardecer y duran todo el jueves.
La ceremonia principal, que tradicionalmente se realiza en Jerusalén y culmina con una espectacular muestra de fuegos artificiales, este año tendrá un espectáculo de pirotecnia sin sonido. También en Tel Aviv cancelaron planes de festejar con cohetillos.
El ministro de cultura israelí Hili Tropper anunció el mes pasado que estaba de acuerdo con los veteranos, afirmando que es deber del Estado respetar a sus combatientes y el trauma que cargan, especialmente el día en que el país celebra su independencia.
“Para la mayoría de los israelíes los fuegos artificiales no son más que unas luces brillantes en el cielo, pero para ellos es el recuerdo de la metralla y la guerra”, escribió Tropper en Facebook el mes pasado.
“Bastante han luchado. Han pagado caro por ello. Este año les rendimos tributo”, añadió.
En Israel, el Día de la Independencia se celebra al día siguiente del Día de Recordación, en que el país honra a los caídos en las guerras y en los ataques terroristas. Es uno de los días más sombríos en el calendario israelí: las familias de los caídos visitan el cementerio y por unos minutos el país entero se paraliza al sonar las sirenas, para recordar a los muertos.
Cierran restaurantes, teatros y otros comercios, y la radio y la televisión transmiten música melancólica y relatos sobre las guerras y otros hechos históricos del país.
Debido a que en Israel el servicio militar es obligatorio y el país ha tenido que librar muchas guerras, muchos israelíes han experimentado el combate y casi todos conocen a alguien que murió en el campo de batalla.