HELSINKI (AP) — Los disturbios registrados en varias ciudades y pueblos de Suecia son delitos extremadamente graves contra la sociedad y se sospecha que algunos manifestantes están vinculados a bandas delictivas que atacan intencionalmente a policías, indicó la policía sueca el lunes.
Suecia, una nación de 10 millones, ha vivido jornadas de disturbios, peleas, incendios provocados y actos de violencia desde el jueves donde han resultado heridos policías y manifestantes. Los incidentes fueron detonados por las reuniones del político danés de ultraderecha Rasmus Paludan y las quemas organizadas de libros del Corán en todo el país.
“Sospechamos que los involucrados (en los disturbios) tienen vínculos con bandas delictivas”, dijo el comisionado de la Policía Nacional, Anders Thornberg, en una conferencia de prensa el lunes. Agregó que algunos de esos “individuos criminales” son conocidos por la policía.
“Me he puesto en contacto con el fiscal para procesar a estos individuos”, detalló.
El comandante de la Policía Nacional, Jonas Hysing, indicó el lunes que 26 policías y 14 personas —manifestantes y otros— resultaron heridas en los disturbios y que 20 vehículos de la policía fueron destruidos o dañados.
Los disturbios más recientes estallaron el domingo por la noche en Malmö, la tercera ciudad más grande de Suecia, cuando una multitud enfurecida, conformada en su mayoría por jóvenes, prendió fuego a neumáticos de autos, escombros y botes de basura en el distrito de Rosengard. Los manifestantes arrojaron piedras y la policía respondió disparando gas lacrimógeno contra la multitud. Una escuela y varios autos fueron incendiados, pero la situación se calmó la madrugada del lunes.
Un total de 11 personas fueron detenidas. No se reportaron heridos de gravedad.
Desde el jueves, además de en Malmö, se han reportado disturbios, agitación y enfrentamientos violentos en Estocolmo, la ciudad central Orebro, las ciudades orientales Linkoping y Norrkoping y el poblado sureño Landskrona.
La policía se ha visto obligada a usar armas en defensa propia, dijo Hysing. Tres personas resultaron heridas en Norrkoping el domingo al ser impactadas de rebote cuando la policía realizó disparos de advertencia contra una multitud de manifestantes.