BRUSELAS (AP) — La Unión Europea se propone eliminar totalmente su dependencia de los combustibles rusos “mucho antes del 2030” para asegurarse de que el bloque de 27 países no vuelve a enfrentar decisiones difíciles, con consecuencias potencialmente nefastas para sus economías, en el marco de crisis geopolíticas como la invasión rusa de Ucrania.
Los líderes de la UE se reunirán en Versalles, en las afueras de París, durante dos días a partir del jueves para buscar formas de reducir su dependencia de los combustibles fósiles de Moscú.
“Acordamos eliminar en forma escalonada nuestra dependencia de las importaciones de gas, petróleo y carbón rusos”, dice un borrador de la declaración que emitirá la cumbre que fue visto por la Associated Press.
Al mismo tiempo, la Comisión Europea ya baraja propuestas para hacer esto realidad. El brazo ejecutivo de la UE dijo que sus medidas “pueden reducir la demanda de gas ruso dos tercios para fin de año” como primer paso.
“Tenemos que independizarnos del petróleo, el carbón y el gas rusos”, dijo la presidenta de la Comisión Ursula von der Leyen en un comunicado. “Sencillamente no podemos confiar en un proveedor que nos amenaza explícitamente”.
La UE importa el 90% del gas natural que usa para generar electricidad, calentar los hogares y abastecer la industria. Casi el 40% del gas que emplea el bloque proviene de Rusia, lo mismo que una cuarta parte del petróleo.
Desde hace una década, la UE enfrenta el dilema de qué hacer con las importaciones de combustibles de Rusia, país con el que tiene relaciones tirantes. Pero la perspectiva de dejar que decenas de millones de personas pasen frío en el invierno por la escasez de combustibles fósiles o precios estratosféricos limitó sus opciones.
La invasión de Ucrania, no obstante, lo cambió todo y en escasas dos semanas la UE elaboró una política energética más robusta, aunque todavía no la puso en vigor formalmente.
El bloque, que ya se proponía desarrollar fuentes de energía renovables debido al cambio climático, acelerará ese proceso para solidificar su independencia energética.
Alemania, Italia y varias naciones de Europa oriental son las más dependientes del gas natural.
Analistas dicen que para eliminar la dependencia del gas natural ruso es imperioso reducir el consumo de ese combustible, empezando por el sector industrial.
La Comisión de la UE, por otro lado, dijo que Europa podría aumentar la compra de gas natural licuado traído en barco en lugar del procedente de Rusia vía gasoductos e importando más gas de otros países.