En Estados Unidos, una empresa de comestibles inició la comercialización de unos caramelos de cannabis que -aseguran- ayudaría a seguir una dieta y bajar de peso.
Según rescata Clarín en conjunto con The New York Times, se trata de las gomitas “Fit”, las cuales prometen ayudar a “interrumpir los hábitos alimentarios poco recomendables y te devolverán el control de tu alimentación”.
Estos comestibles, comercializados por la empresa Wana Brands, de momento, solo están a la venta en el país norteamericano y dentro de sus ingredientes, está la tetrahidrocannabivarina (THCV), uno de los compuestos que se encuentran en la planta de marihuana, pero que no parece tener efectos psicoactivos.
Sin embargo, según algunos estudios, la THCV podría tener efecto sobre el apetito y la diabetes y desde la empresa que creó este caramelo, aseguran que fue probado en un ensayo clínico, encargado por ECS Brands y apoyado por Institutos Nacionales de Salud.
Según el sitio web de Wana, “el ensayo clínico de 90 días en humanos, hace poco finalizado y apoyado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por su sigla en inglés), reveló que cien de los cien participantes en el estudio perdieron peso sin hacer ejercicio ni cambiar los valores del gasto calórico diario”.
Incluso, la hoja informativa de ECS Brands dice que el ensayo se realizó bajo la dirección de la Clínica Mayo, sin embargo, el recinto aseguró no tener constancia del ensayo ni estar registrado en ClinicalTrials.gov.
Arthur Jaffee, director general de ECS Brands, insistió en que los NIH participaron en el proceso y atribuyó la discrepancia a un “problema de papeleo”.
“Confiamos plenamente en que todo lo que hicimos es correcto y verdadero”, afirmó.
Sin embargo, expertos aseguran que hay pocas pruebas clínicas que aseguren que el THCV pueda ser eficaz para reducir la obesidad y el apetito.
Los especialistas entrevistados por el citado medio detectaron varias señales de alarma, como el hecho de que el presunto estudio fuese patrocinado por el NIH, lo cual fue negado por el mismo organismo.
Incluso, los expertos aseguran que los resultados parecen ser demasiado buenos para ser ciertos.
“He visto muy pocos estudios en los que algo funcione el cien por ciento de las veces”, señaló Amir Englund, psicofarmacólogo especializado en cannabinoides del King’s College de Londres.
Sin embargo, pese a que científicos del campo del cannabis ven mucho potencial para la planta, y para la THCV en particular, por ahora, pareciera que el marketing va muy por delante de la investigación, apuntando a que las empresas hacen promesas sobre sus productos con pocas pruebas.
“Si funciona, haz el estudio adecuado y publica los datos. Deja que tus colegas revisen los hallazgos. Podría descubrirse algo realmente interesante, pero no me creo esta historia”, decretó Margaret Haney, directora del Laboratorio de Investigación de Cannabis y codirectora del Centro de Investigación de Uso de Sustancias en el Centro Médico de la Universidad de Columbia.