La temporada navideña suele ser un momento de generosidad y compartir con seres queridos, pero una abuela británica ha generado controversia al adoptar una práctica inusual: cobrar a su familia por la cena de Navidad. Algo que no ha tardado en desatar todo tipo de conversaciones en las redes sociales sobre las fechas decembrinas y todo lo que implican.
Caroline Duddridge, de 63 años y residente en Fairwater, Cardiff, en Gales, ha elevado sus tarifas para la celebración del 2023, argumentando que es necesario cubrir el creciente costo de vida y los precios en aumento de los alimentos. La peculiar tradición de Caroline no es nueva; comenzó en 2015 tras la muerte de su esposo, cuando decidió que los invitados a su mesa deberían contribuir económicamente al festín navideño.
La abuela que le cobra a su familia por la comida de navidad
En 2022, sus dos hijos pagaron 15 libras esterlinas, sus tres hijas 10, sus cuatro nietos mayores de cinco años 5, y los dos nietos de tres años, 2.50 cada uno. Sin embargo, este año, Caroline ha decidido ajustar los precios, generando aún más controversia.
En una entrevista con BBC Radio 5 Live, la abuela explicó que aumentó las tarifas de sus hijas en añadiendo 2 libras esterlinas, en respuesta a críticas anteriores que la acusaban de sexista. Caroline defiende sus tarifas, argumentando que, a pesar de la inflación, el valor por dinero es innegable.
Su festín navideño se extiende desde la víspera de Navidad hasta el Boxing Day e incluye un variado menú que va desde bocadillos en mini buffet hasta una opulenta cena de pavo con todos los acompañamientos.
Una navidad en familia donde se debe pagar
También se añade un asado de nueces y una selección de cuatro postres en la comida preparada por Caroline. Además, ofrece un bufé completo el 26 de diciembre. La abuela también expresó su preocupación por los crecientes costos en los supermercados. Aunque ha subido sus precios, duda de que sea suficiente para cubrir los gastos, considerando que una compra general puede alcanzar fácilmente las 30 o 40 libras esterlinas.
Caroline describe la situación como “aterradora” y se pregunta hacia dónde se dirige esta tendencia de aumento de precios. A pesar de las críticas, Caroline ha encontrado apoyo en algunas personas que consideran su enfoque como una solución práctica para compartir los costos de las celebraciones navideñas.